Miro con discreción a las personas que viajan en este vagón de tren, y trato de adivinar cómo es cada una, cuál es su vida, adónde va. Se me ocurre fijarme en quién lee y quien no, y qué es lo que leen. Primero echo un vistazo general y empiezo a contar: tres personas tienen en sus manos un libro. Y veo que todas son mujeres (nadie ha impuesto una discriminación positiva). No hay ningún inspector que diga, con tonillo de Goucho Marx: A ver, en este convoy ha de leer el cincuenta por ciento de los viajeros, y el cincuenta por ciento de ese cincuenta por ciento han de ser mujeres. Un chico joven tiene un libro bajo el brazo: no lo lee, pero es un dato alentador. Tres hombres sí que leen: dos, periódicos deportivos, y el otro, un diario de información general. Como soy optimista pienso: al llegar a sus casas, diez personas más de las que viajan en este vagón se podrán a leer un libro, en vez de quedarse fritas ante la televisión o enganchadas al ordenador. Se me ocurre que un vagón de tren es, además de vehículo de transporte colectivo, símbolo de la vida del hombre sobre la tierra, y el libro cobra, de pronto, aún más importancia. Seamos realistas: ¿cuántas personas leían hace cien años? No lo duden: muy pocas. Ahora se lee más. Puestos a ser algo, y hemos de tratar siempre de ser alfo, es mejor ser optimista -sin dejar de ser realistas-. ¿Cuántas personas leerán en los trenes, cuántas personas leerán en mi querida tierra de Castilla-La Mancha, dentro de cincuenta años, si el calentamiento del planeta lo permite? Más, muchas más. Hemos de creer que seremos -permítanme que me incluya- más felices. Y será porque se leerá más. Ya lo saben: leamos, por favor. Por el bien de todos, leamos. Leyendo vivimos muchas vidas, y la nuestra es más plena y más rica.
Día del Libro en CLM 2007. Mensaje de José Corredor Matheos
Claro M. Fdez-Caballero Martín-B.
Historiador, docente, articulista, conferenciante y guía turístico licenciado en Historia del Arte. Es coordinador del grupo de investigación local de Historia de la Universidad Popular de Herencia. Ha escrito numerosos artículos de historia y patrimonio en diferentes revistas y periódicos tanto locales como comarcales y regionales, y es coautor de varias publicaciones sobre historia y patrimonio. En la actualidad también forma parte de la directiva de varias asociaciones culturales y de la redacción del periódico digital herencia.net. . Google+