Herencia se sumó el pasado 27 de octubre al Día Internacional del TDAH iluminando sus molinos y rotondas de color naranja para concienciar a la sociedad de las dificultades a las que se enfrentan niños y adultos afectados por este trastorno y con el objetivo de seguir dando visibilidad a estos tipos de trastornos neurobiológicos que sufren niños y adolescentes.
Con este gesto, Herencia pretende continuar sensibilizando y concienciando a la sociedad sobre las necesidades de las personas que presentan este trastorno que afecta al 5% de la población, así como su reconocimiento y correcta atención desde la infancia.
Una persona con TDAH tiene unas características, propias a su diagnóstico, que interfieren en su día a día tales como dificultades para concentrarse, para gestionar el tiempo y planificar, para terminar tareas, para controlar sus impulsos, etc. Estos aspectos se pueden mejorar y se llegan a gestionar bien con una buena intervención multidisciplinar y temprana.