Desde hace unos días, la iglesia conventual de la Merced cuenta con una capilla de culto abierta las 24 horas del día tras acondicionar una de las ventanas de la capilla del Cristo del Consuelo que dan a la calle Convento, concretamente la situada bajo el pasadizo de la Merced.
Allí se ha colocado de manera permanente, y para que pueda recibir culto las 24 horas del día, una antigua talla de madera de finales de los años 40 del siglo XX y que ahora se ha preparado al culto con el nombre del Santísimo Cristo de la Salud y de las Ánimas.

Los orígenes de la talla del Cristo de la Salud y las Ánimas
Obra de los afamados Talleres Campañyá de Barcelona, adquirida, según las investigaciones del historiador Mercedario Mario Alonso Aguado, por por Doña Aurelia Parra para presidir el retablo que en 1948, Gabriel Enríquez de la Orden y su esposa Carmen Antolínez de Castro encargaron en los talleres compostelanos de José Rodríguez y Puente por 41.000 pesetas para remplazar el desaparecido retablo barroco que presidía la antigua capilla del Cristo del Consuelo.




