El Diario Oficial de Castilla-La Mancha (DOCM) ha publicado una resolución de la Dirección General de Agricultura y Ganadería que establece las medidas sanitarias a implementar en las explotaciones de ovino y caprino de la región, a raíz de la detección de brotes de viruela ovina y caprina. Las provincias afectadas por estas medidas, que comprenden tanto una zona de vigilancia como una zona de restricción adicional, incluyen Albacete, Ciudad Real, Cuenca y Toledo.
La resolución detalla la creación de una Zona de Vigilancia (ZV), que abarca explotaciones de ovino y caprino en varios municipios, incluyendo Fuensanta, La Roda, Tarazona de la Mancha, Villalgordo del Júcar, Minaya, Munera y Villarrobledo en Albacete. En Ciudad Real, se incluyen localidades como Alcázar de San Juan, Arenales de San Gregorio, Daimiel, Herencia, Manzanares, Pedro Muñoz, Socuéllamos, y Tomelloso, entre otros.
Los municipios en Cuenca incluyen Atalaya del Cañavate, Casas de Fernando Alonso, Casas de Haro, Honrubia, Pinarejo, Alarcón, Casasimarro, Belmonte, La Alberca de Záncara, y Mota del Cuervo, por nombrar algunos. Mientras que en Toledo, se encuentran Villafranca de los Caballeros, Villacañas, Quintanar de la Orden, Miguel Esteban, Madridejos, La Villa de Don Fabrique, La Puebla de Almoradiel, El Toboso y Camuñas.
Dentro de la Zona de Vigilancia, las salidas de las explotaciones de ovino y caprino a los mataderos ubicados en la misma zona solo serán permitidas bajo ciertas condiciones. Por ejemplo, la solicitud de movimiento debe hacerse al menos 48 horas antes del traslado, los animales deben ser inspeccionados clínicamente en el momento de la carga, y los medios de transporte deben estar debidamente limpiados y desinfectados.
Además, la resolución establece una Zona de Restricción Adicional (ZRA) que comprende las explotaciones de ovino y caprino en las provincias de Albacete, Ciudad Real, Cuenca y Toledo que no están incluidas en la Zona de Vigilancia.
Esta resolución entró en vigor el mismo día de su publicación, el viernes 28 de julio. Las medidas adoptadas buscan controlar y prevenir la propagación de la viruela ovina y caprina, garantizando así la salud y bienestar de estos animales.
