La capacidad de los embalses de Entrepeñas y Buendía, vitales en la cabecera del Tajo, ha sufrido una merma importante durante la última semana, según información proporcionada por la Confederación Hidrográfica del Tajo y difundida por Diario CLM. En conjunto, han perdido 15,5 hectómetros cúbicos, dejándolos con un almacenamiento de 1.108,61 hectómetros cúbicos; es decir, solo el 44,02% de su máximo de 2.518 hectómetros.
El embalse de Entrepeñas ha visto una disminución de 5,25 hectómetros cúbicos en los pasados siete días, retención que equivale a 521,93 de su capacidad máxima de 813 hectómetros. Por su parte, el embalse de Buendía ha registrado una caída mayor, de 10,25 hectómetros cúbicos, dejándolo con 586,68 hectómetros cúbicos de los 1.705 que puede llegar a contener.
No obstante, la situación de los embalses de la provincia de Guadalajara es dispar. A excepción de dos, la mayoría ha experimentado una reducción en sus niveles de agua. Por el contrario, el embalse de Bolarque ha tenido un ligero incremento de 0,56 hectómetros cúbicos, alcanzando así 25,87 de su tope de 31 hectómetros. Similar situación se observa en el embalse de Almoguera, donde se ha producido un aumento de 0,26 hectómetros cúbicos, situándose en 6,24 de su límite de almacenaje.
En contraparte, el embalse de Alcorco ha disminuido en 1,74 hectómetros cúbicos, ubicándose en 128,19 de un potencial total de 180. El de Beleña también ha experimentado una caída de 1,19 hectómetros para un total de 41,8, mientras que Pálmaces decreció 0,42 hectómetros quedando en 21,8 hectómetros, y La Tajera disminuyó 0,64 y se establece en 52,79 hectómetros, de sus máximos de 53 y 59, respectivamente.
El embalse del Atance vio su volumen disminuido en 0,09 hectómetros quedando en 21,56 de una posible plenitud de 35; El Vado sufrió una merma de 3,05 hectómetros situándose en 24,76 hectómetros, de una capacidad total de 56. Por último, el dato provisto de la provincia de Cuenca revela que el embalse de Molino de Chincha ha perdido 0,15 hectómetros esta semana, quedando con 5,64 de su máximo de 6 hectómetros cúbicos.
El descenso en las reservas hídricas preocupa a las autoridades locales, que ya valoran medidas para gestionar más eficientemente el recurso, dada la importancia de estos embalses no solo para el suministro de agua potable, sino también para la agricultura y otras actividades económicas de la región.
