El incendio que se ha declarado este jueves en el término municipal de Enguídanos, en la provincia de Cuenca, ha sido dado por controlado a las 18.15 horas. A pesar de ello, los esfuerzos por extinguirlo de manera definitiva continúan, con la participación de cinco medios terrestres y un equipo de 24 personas.
Según informa la web del Sistema de Información de Incendios Forestales del Gobierno regional, que ha sido consultada por Diario CLM, el fuego fue detectado a las 14.39 horas por un vigilante fijo. Dicho sistema ha sido crucial para la rápida intervención de los equipos de emergencia.
El área afectada por el incendio es un bosque predominantemente compuesto por un 70 por ciento de Pinus halepensis (conocido como pino carrasco), un diez por ciento de Juniperus phoenicea y otro diez por ciento de Juniperus oxycedrus, ambas especies conocidas comúnmente como enebros en distintas variedades. La diversidad de vegetación y la densidad del bosque han complicado en cierta medida las labores de control y extinción del incendio.
Las autoridades locales han señalado la importancia de mantener la vigilancia en la zona, ya que aunque se ha controlado el avance de las llamas, las condiciones climatológicas podrían cambiar y avivar nuevamente el incendio. Por este motivo, los equipos de emergencia continúan trabajando intensamente y evalúan constantemente la situación para evitar cualquier posible reactivación.
El incidente ha generado preocupación entre los habitantes de Enguídanos y sus alrededores. Las autoridades competentes han pedido a la población que evite acercarse a la zona afectada para no obstaculizar el trabajo de los equipos de extinción y por su propia seguridad.
Por el momento, no se han reportado daños personales, pero el impacto medioambiental es significativo debido a la pérdida de masa forestal y la amenaza a la biodiversidad local. Los especialistas en medio ambiente comenzarán en los próximos días a estudiar las mejores estrategias para la recuperación del área afectada una vez el incendio sea completamente extinguido.
Este evento pone de manifiesto, una vez más, la importancia de la prevención y la pronta respuesta ante incendiarios forestales, fenómenos cada vez más frecuentes en diversas regiones debido al cambio climático y otras circunstancias agravantes.
