El vicepresidente segundo del Gobierno de Castilla-La Mancha, José Manuel Caballero, se ha reunido con el secretario general de UPA en la región, Julián Morcillo, en el marco de la ronda de reuniones que se están manteniendo con los principales agentes de la comarca del Alto Guadiana. Este encuentro tiene como objetivo escuchar y colaborar con los profesionales y colectivos implicados en el Plan de Recuperación de las Tablas de Daimiel, un esfuerzo coordinado con el Gobierno de España para enfrentar la escasez de agua.
José Manuel Caballero, acompañado del director general de Desarrollo Rural, José Juan Fernández Zarco, ha enfatizado a Julián Morcillo la relevancia que el proceso de regularización de los pozos de las explotaciones prioritarias y los agricultores profesionales tiene para el Gobierno de Castilla-La Mancha. Según ha explicado, este proceso es esencial para asegurar el futuro de dichas explotaciones. Además, constituye un paso clave para establecer un marco de actuación que favorezca la recuperación del Parque Nacional de las Tablas de Daimiel, un recurso ambiental crucial, al mismo tiempo que se impulsa el desarrollo económico y social de la comarca.
En sus declaraciones, el vicepresidente segundo solicitó al secretario general de UPA un compromiso firme para buscar, de manera conjunta, la sostenibilidad de la comarca del Alto Guadiana desde las perspectivas social, económica y medioambiental. Agradeció también la disposición de la UPA y de Julián Morcillo a colaborar en este desafío que están afrontando tanto el Gobierno regional como el Gobierno de España, destacando la importancia de trabajar «por el presente y el futuro de esta comarca y del Parque Nacional de las Tablas de Daimiel».
Caballero subrayó la significancia del sector agroalimentario en la comarca, destacando que representa el 64% de la economía regional y que en ésta se encuentran más de la mitad de las cooperativas y bodegas de Castilla-La Mancha. Además, mencionó que el sector agrario supone un 14% del empleo en la comarca, superando la media regional del 10%. También resaltó que el 46% de la superficie de cultivo y el 52% de las hectáreas de regadío de Castilla-La Mancha se concentran en la comarca del Alto Guadiana, donde el regadío ocupa un 20% de la superficie cultivable, frente al 15,6% de la región en general.
Adicionalmente, se ha informado que ya se han establecido tres grupos de trabajo. Uno dedicado a los temas relacionados con el agua, otro a la conservación medioambiental del espacio natural, y un tercero enfocado en el desarrollo económico y social de la comarca. Caballero destacó la voluntad del Gobierno regional para alcanzar acuerdos con el Gobierno de España, aunque aclaró que estos acuerdos «no serán a cualquier precio». El objetivo es encontrar soluciones sostenibles que aseguren la mejoría ambiental de las Tablas de Daimiel así como el desarrollo equilibrado de las actividades agrarias y sociales en la región.