El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, expresó recientemente su opinión sobre el acuerdo entre el partido Bildu y el Gobierno en el marco de la Ley de Seguridad Ciudadana, conocida comúnmente como la ‘ley mordaza’. Durante un encuentro con medios de comunicación en la sede de ‘Acelera by Cummins’ en Guadalajara, García-Page comentó que si Bildu «se quitara la mordaza» y ofreciera disculpas por sus acciones pasadas, «sería suficiente».
Las declaraciones del presidente regional subrayan la necesidad de reconciliación y el reconocimiento del sufrimiento de las víctimas del terrorismo. García-Page destacó que un gesto de perdón y reconocimiento por parte de Bildu podría ser un paso significativo hacia la reconciliación. En sus palabras, «si se quitaran ellos la mordaza y pudieran de una vez pedir perdón y reconocer el dolor de las víctimas ya sería suficiente».
García-Page también destacó la ironía de que se haya alcanzado un acuerdo con una organización que, según él, «se dedicó a ponerle mordaza al pueblo vasco durante tantos años». Estas afirmaciones han reavivado el debate sobre el rol de Bildu en la política española actual y su relación con la memoria histórica de las víctimas del terrorismo en el País Vasco. La postura de García-Page podría tener un impacto en la percepción pública del acuerdo y sus consecuencias para la seguridad y los derechos civiles en España.
