El Grupo Parlamentario VOX en las Cortes de Castilla-La Mancha ha impulsado una iniciativa que podría marcar un punto de inflexión en las discusiones públicas sobre la política migratoria en la región. El partido ha solicitado formalmente la comparecencia del presidente de la Junta, Emiliano García-Page, y de la consejera de Bienestar Social, Bárbara García Torijano. Esta petición está directamente relacionada con el controvertido proyecto de instalar un centro de acogida de inmigrantes en las instalaciones del aeropuerto de Ciudad Real.
Iván Sánchez, portavoz de VOX en las Cortes, ha puesto de manifiesto la urgencia de esta comparecencia, alegando que los ciudadanos merecen ser informados sobre el alcance y las implicaciones de este proyecto. En palabras de Sánchez, es esencial que tanto García-Page como García Torijano ofrezcan explicaciones inmediatas. Según un comunicado de prensa de VOX, el proyecto podría tener un gran impacto en la región, y por ello resulta fundamental que se detalle lo acordado y cómo afectará a los habitantes de Castilla-La Mancha.
El partido ha manifestado su inquietud acerca de varias posibles repercusiones. En particular, destacan su preocupación sobre un posible «efecto llamada» que podría derivarse de la apertura del centro de acogida. También plantean dilemas sobre la seguridad, el bienestar social y la gestión de los recursos públicos, temas que consideran son de enorme relevancia para la comunidad local, especialmente para los residentes de Ciudad Real y sus alrededores.
VOX ha acusado al Gobierno de Castilla-La Mancha de ocultar información relacionada con el proyecto. En particular, se ha señalado que los responsables políticos, incluido el presidente Emiliano García-Page, estarían al tanto de esta iniciativa antes de su anuncio público. «Nadie se cree que Sánchez y Page no hablaran de ese tema en su reunión diez días antes del anuncio», declaró el partido, refiriéndose a supuestas conversaciones previas.
La solicitud de comparecencia supone un reto para el Ejecutivo regional, que ahora deberá decidir si accede a proporcionar más detalles a la ciudadanía. Entretanto, el debate público sobre el centro de acogida en Ciudad Real parece estar sólo comenzando, a medida que aumenta la expectativa sobre cómo gestionarán las autoridades este complejo asunto.
