En un contexto de preocupación por la seguridad laboral, el secretario regional de Comisiones Obreras (CCOO), Paco de la Rosa, ha anunciado una investigación detallada sobre el reciente accidente laboral que tuvo lugar en la empresa Alcaliber de Toledo. La tragedia, causada por una explosión, resultó en varios heridos y ha suscitado una serie de interrogantes sobre las prácticas de seguridad en el lugar de trabajo.
Durante un encuentro con Juan Alfonso Ruiz Molina, consejero de Hacienda, Administraciones Públicas y Transformación Digital, De la Rosa detalló los planes del sindicato para llevar a cabo un análisis riguroso de los protocolos de seguridad seguidos por la empresa. Subrayó que la intención no es culpar apresuradamente a la empresa o a los empresarios, sino que, si es necesario, se depuren responsabilidades. «Acusar a la ligera sería una temeridad», afirmó De la Rosa, quien insistió en la urgencia de revisar la eficacia de las medidas de prevención y el funcionamiento de los sistemas de respuesta ante siniestros.
En la misma ocasión, se abordó el Proyecto de Ley de Presupuestos de Castilla-La Mancha para el año próximo, y se hizo hincapié en la importancia de destinar recursos a la seguridad laboral. Uno de los proyectos destacados es la próxima creación del Instituto Regional de Riesgos Laborales, que se propone como un recurso clave para la investigación y prevención de accidentes laborales. De la Rosa expresó que la salud laboral es fundamental para evitar siniestros y afirmó que el compromiso del sindicato es firme en esta área.
CCOO pretende que este nuevo Instituto sea un foro de participación colectiva, donde se puedan establecer estrategias efectivas para prevenir accidentes en el trabajo. De la Rosa aclaró que lo esencial no es el nombre de la entidad, sino su eficacia como herramienta contra la siniestralidad laboral.
Por su parte, Ruiz Molina indicó que el gobierno regional ya ha asignado un presupuesto de 1,5 millones de euros para la puesta en marcha de esta iniciativa. No obstante, aún queda por decidir si este organismo funcionará de forma independiente o integrará las estructuras administrativas ya existentes. Tras estos anuncios, tanto el sindicato como las instituciones gubernamentales buscan aunar esfuerzos para mejorar la seguridad laboral y proteger a los trabajadores de futuros incidentes.
