El portavoz del grupo socialista en las Cortes de Castilla-La Mancha, Antonio Sánchez Requena, ha presentado los presupuestos regionales para 2025, que muestran un firme compromiso con el sector agrario. Durante su intervención en el Parlamento autonómico, antes de la comparecencia del consejero de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, Julián Martínez Lizán, Sánchez Requena destacó la importancia de estos presupuestos como una respuesta a los desafíos del sector.
Una de las prioridades clave de los presupuestos es el impulso del relevo generacional en el ámbito agrario. Con el objetivo de garantizar la sostenibilidad y continuidad del sector, se busca incentivar la incorporación de jóvenes agricultores a través de ayudas y programas específicos que faciliten su acceso a la tierra y al crédito. Esta medida no solo pretende rejuvenecer el sector, sino también preservar la tradición agrícola de la región.
La innovación y digitalización también ocupan un lugar central en las nuevas cuentas públicas. Se destinarán recursos significativos para fomentar la investigación y el desarrollo tecnológico en las explotaciones agrarias, con el objetivo de mejorar su competitividad y rentabilidad. Sánchez Requena subrayó que lograr una mayor calidad y prestigio en los productos agrícolas es fundamental para conquistar nuevos mercados, lo que ya se refleja en el aumento del 13% en las exportaciones en los primeros meses del año.
La gestión eficiente del agua emerge como otra piedra angular de los presupuestos. En un contexto de creciente escasez hídrica, se apuesta por el desarrollo de un regadío eficiente y sostenible, situando a Castilla-La Mancha como un referente nacional en la materia. La importancia de cada gota de agua disponible cobra especial relevancia, y se adoptan medidas para optimizar su uso en la agricultura.
Además, se abordan los desafíos que la nueva realidad climática presenta para los agricultores y ganaderos. Los presupuestos contemplan inversiones en seguros agrarios y sanidad animal, destinados a mitigar los riesgos asociados a daños climáticos, sequías, plagas y enfermedades. Sánchez Requena indicó que estas inversiones buscan ofrecer una mayor protección y estabilidad al sector frente a eventos adversos.
En conclusión, Castilla-La Mancha apuesta por fortalecer el sector agroalimentario regional, consolidando su crecimiento y resiliencia ante los desafíos actuales y futuros. Las medidas incluidas en los presupuestos de 2025 reflejan el compromiso del gobierno regional con un sector que es motor económico y social en la región, y confían en mantener su buen estado de forma para los años venideros.
