El Consejo de Gobierno de Castilla-La Mancha ha dado un paso significativo hacia la mejora del sistema sanitario regional con la aprobación de un ambicioso Plan de Atención Primaria de Salud. Este martes, en una rueda de prensa celebrada en el Palacio de Fuensalida, el consejero de Sanidad, Jesús Fernández Sanz, anunciaba un proyecto cuyo principal objetivo es incrementar la continuidad asistencial y fortalecer la capacidad resolutiva del sistema sanitario, respaldado por un presupuesto acorde a sus necesidades.
Este plan forma parte de los nueve proyectos que se enmarcan dentro del «Plan de Salud Horizonte 25», cuya culminación se prevé para el próximo año. El foco central se sitúa en el robustecimiento de la Atención Primaria y comunitaria, concebida como el pilar fundamental del sistema de salud. La intención es lograr una mejora tanto en la accesibilidad como en la calidad del cuidado sanitario ofrecido a la ciudadanía, promoviendo así la equidad.
El diseño de este plan es el resultado de un considerable proceso de consulta en el que participaron cerca de 4.000 personas, entre profesionales del ámbito sanitario y usuarios del sistema, que contribuyeron a identificar los principales retos a los que se enfrenta la Atención Primaria en la región. Entre los desafíos destacados figuran el envejecimiento demográfico, la baja densidad de población en determinadas áreas y la necesidad de motivación y reciclaje del personal sanitario.
Con un diagnóstico bien definido, el plan plantea 13 objetivos específicos que incluyen asegurar una financiación adecuada, incrementar el número de profesionales sanitarios y reducir la temporalidad laboral en el sector de Atención Primaria a menos del 8%, siguiendo las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud. También se persigue incrementar la capacidad resolutiva del sistema, modernizar la cartera de servicios y optimizar la atención al paciente.
El proyecto también prevé cambios en la organización del personal. Se busca fortalecer el papel de las enfermeras, especialmente aquellas especializadas en familia y comunidad, así como reorganizar los equipos y roles profesionales para mejorar la gobernanza y el liderazgo dentro del sector.
En el ámbito tecnológico, el plan se centrará en la implementación de innovaciones como teleconsultas y videoconsultas, el desarrollo de herramientas digitales para el manejo de enfermedades crónicas y el fomento de la docencia y la investigación en Atención Primaria.
Jesús Fernández Sanz destacó que este Plan representa un firme compromiso del Gobierno regional con la mejora de la salud pública. Desde 2015, se han logrado importantes avances en la incorporación de personal y tecnología, así como en inversiones presupuestarias. Actualmente, explicó, en Castilla-La Mancha se realizan alrededor de 28 millones de consultas de Atención Primaria al año, equivalentes a unas 14 consultas por ciudadano, lo cual es un indicador de la buena accesibilidad del sistema sanitario en la región.