El concejal de Turismo, Vivienda y Relaciones con la UCLM, José Manuel Velasco, ha mostrado su satisfacción ante los resultados turísticos experimentados en Toledo durante el reciente periodo navideño. Con una ocupación hotelera media del 92,6 por ciento y un aumento al 95,2 por ciento los fines de semana, la afluencia de turistas a la ciudad ha sido notablemente alta.
Basándose en datos proporcionados por el Consistorio local, Velasco ha detallado que entre el 22 de diciembre y el 6 de enero, un total de 1.313.044 vehículos accedieron a Toledo. Este flujo intenso de tráfico no solo subraya la popularidad de la ciudad como destino turístico, sino que también ha permitido a las autoridades llevar a cabo una vigilancia efectiva sobre la movilidad urbana, previniendo potenciales aglomeraciones.
El concejal ha destacado la importancia de mejorar la experiencia de los visitantes, sugiriendo alternativas de aparcamiento para evitar saturaciones en el Casco Histórico de Toledo. Esta iniciativa forma parte de una estrategia más amplia destinada a diversificar las ofertas turísticas de la ciudad, lo que ha ayudado a descongestionar las áreas históricas más transitadas y ha mejorado significativamente la movilidad en toda la urbe.
Velasco ha elogiado las actividades organizadas durante la época festiva, asegurando que Toledo sigue siendo un destino atractivo para muchos turistas. La planificación turística actual se centra en revitalizar lugares emblemáticos como la muralla, el Paseo de Recaredo, la Vega y los puentes, promoviendo una circulación fluida entre estos puntos y reduciendo la dependencia del acceso por Zocodover.
Para concluir, el concejal extendió su agradecimiento a los hosteleros y comerciantes locales, junto a todos aquellos que han hecho posible que la celebración navideña fuese un éxito turístico. Subrayó que Toledo ha sido destacada en varios medios como un destino preferente para el turismo de interior durante estas fechas festivas, y afirmó el compromiso del equipo de Gobierno de continuar trabajando en la desestacionalización del turismo. El objetivo es mantener un flujo constante de visitantes durante todo el año, incluso en las temporadas tradicionalmente consideradas como bajas.