El presidente del Partido Popular de Castilla-La Mancha, Paco Núñez, ha lanzado duras críticas hacia Emiliano García-Page, recientemente reelegido como secretario general de los socialistas en la región y actual presidente de la Junta. Núñez acusa a García-Page de «cobardía» por no haber defendido las necesidades urgentes de Castilla-La Mancha ante el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, durante el Congreso Regional del PSOE que tuvo lugar en Toledo.
En el marco de la clausura de la Interparlamentaria del PP en Ciudad Real, Núñez destacó lo que considera un «pacto oculto» entre García-Page y Sánchez. Según Núñez, este pacto quedó en evidencia al no abordarse cuestiones críticas para la comunidad autónoma, como una política hídrica justa para la agricultura, la mejora de la financiación autonómica y las inversiones en infraestructuras. «La cobardía de Page le impidió tomar la palabra y decir cosas que Pedro Sánchez debería haber escuchado», afirmó Núñez.
El líder del PP también señaló que, mientras su partido se enfoca en debatir y defender los intereses de la región, los socialistas parecen más centrados en preservar sus posiciones de poder. Criticó la falta de soluciones ofrecidas por el PSOE al creciente costo de vida en la región, que se enfrenta al índice de precios al consumidor más alto de España, además de la precariedad económica que afecta a gran parte de sus habitantes.
Núñez lamentó lo que describe como una «situación de abandono» en Castilla-La Mancha tras diez años de gobierno socialista, señalando que la región sufre de algunos de los peores indicadores de bienestar comparados con otras comunidades autónomas. Destacó que el IPC de Castilla-La Mancha ha experimentado un incremento del 25,3% entre 2021 y 2025, superando la media nacional. Ante esta realidad, abogó por un cambio hacia un modelo de gobierno que se aleje de las políticas socialistas, mencionando ejemplos de gestión positiva en comunidades gobernadas por el PP como Madrid, Andalucía y Castilla y León.
«Hemos demostrado que se pueden bajar impuestos, mejorar la recaudación y aumentar los servicios públicos», aseguró Núñez, añadiendo que «el dinero está mejor en el bolsillo de los ciudadanos». Finalmente, hizo un llamamiento a la unidad de los castellanomanchegos para lograr un cambio político en la región, prometiendo que, bajo el liderazgo del Partido Popular, Castilla-La Mancha se convertirá en un «motor de oportunidades y desarrollo».
