En un esfuerzo por fortalecer el futuro del sector agrario en Castilla-La Mancha, la Consejería de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural ha presentado un conjunto de ocho propuestas estratégicas para la próxima Política Agraria Común (PAC). En un encuentro significativo celebrado en Madrid el 20 de febrero de 2025, el consejero Julián Martínez Lizán entregó el documento al comisario de Agricultura y Alimentación, Christophe Hansen.
Las propuestas destacadas están encaminadas a garantizar un presupuesto equitativo para la PAC, ajustado a las demandas específicas del territorio. En un contexto donde la sostenibilidad y la viabilidad económica son fundamentales, el gobierno regional busca asegurar la renta de agricultores y ganaderos mediante estas iniciativas.
Uno de los pilares del documento es conocer a fondo el presupuesto destinado al nuevo periodo de programación. La propuesta incluye la creación de un Fondo Especial de Relevo Generacional en el Sector Agrícola Europeo, destinado a facilitar la transición y la entrada de nuevas generaciones en el campo.
La protección de la figura del agricultor activo es otro de los puntos clave. Asimismo, se manifiesta un compromiso político y económico con la agricultura ecológica, un sector que ha mostrado un crecimiento sustancial y que se considera vital para el desarrollo rural sostenible en la región.
El documento también aboga por la implementación de cláusulas espejo y mecanismos de protección frente a aranceles, para garantizar que los productos de Castilla-La Mancha y del resto de Europa compitan en igualdad de condiciones en el mercado global. La indicación de origen del producto y una remuneración justa para los productores son otras de las iniciativas propuestas para asegurar una cadena de valor equitativa.
Dentro del sector vitivinícola, se busca una flexibilización de los mecanismos actuales, permitiendo una adaptación más efectiva a las condiciones cambiantes del mercado. Además, se destaca la colaboración para certificar las absorciones de carbono en suelos, una medida que conecta directamente con los objetivos de sostenibilidad medioambiental de la UE.
Finalmente, se subraya la importancia de la formación continua de agricultores y ganaderos. La mejora en la gestión sostenible es vista como una necesidad imperiosa para afrontar los retos futuros del sector, dotando a los profesionales del campo de herramientas y conocimientos para optimizar sus prácticas.
Estas propuestas serán objeto de discusión en los próximos meses, esperando que el diálogo constructivo con las autoridades europeas permita avanzar en una PAC que responda realmente a las necesidades de las regiones agrarias y sus trabajadores. La posición anticipada de Castilla-La Mancha pretende influir en el diseño de políticas agrícolas que aseguren la prosperidad y sostenibilidad del campo en los años venideros.