La Audiencia Provincial de Ciudad Real será escenario este miércoles 26 de febrero de un juicio que ha captado la atención de muchos por la violencia de los hechos que se juzgarán. Un hombre identificado como A.L.K., de nacionalidad extranjera, se enfrenta a cargos luego de una brutal pelea en un bar de Daimiel que terminó con una parte de la oreja de la víctima arrancada a mordiscos.
El incidente ocurrió en la madrugada del 4 de septiembre de 2022, cuando lo que comenzó como una acalorada discusión entre los dos hombres degeneró rápidamente en una violenta confrontación física. Según el acta de acusación obtenido por Europa Press, la víctima sufrió severas heridas que requirieron intervención quirúrgica, después de que A.L.K., supuestamente, le arrancara de un mordisco la porción superior de su pabellón auricular derecho.
En el marco de la pelea, las agresiones no fueron unilaterales. A.L.K. también resultó herido, habiendo recibido varios golpes que le causaron una contusión en la cabeza y una laceración en el párpado superior derecho. A pesar de sus propias lesiones, es A.L.K. quien enfrenta la posibilidad de una pena severa.
La Fiscalía ha solicitado para él una condena de cuatro años de prisión por el delito de lesiones agravadas. Además, se ha pedido que A.L.K. indemnice a la víctima con 8.750 euros por el daño estético irreparable causado por la pérdida de parte de la oreja.
El otro protagonista en esta historia de violencia no quedará completamente exonerado de responsabilidad. Por su implicación en la pelea, se enfrenta a una multa de dos meses, con una tarifa diaria de ocho euros, penalizado por un delito leve de lesiones.
El juicio promete ser un proceso en el que se definan responsabilidades y se establezcan las consecuencias legales de aquella trágica noche de septiembre. Mientras tanto, los habitantes de Daimiel y la comunidad local muestran expectación por el desenlace de un caso que ha sacudido la tranquilidad habitual del municipio.
