El Consejo de Gobierno de Castilla-La Mancha ha dado luz verde a un nuevo decreto que tiene como objetivo establecer un registro para aquellos profesionales de la salud que deseen declarar su objeción de conciencia respecto a la realización de interrupciones voluntarias del embarazo. Este movimiento responde a las directrices planteadas por la reciente reforma de la ley del aborto aprobada en el Congreso de los Diputados a principios de 2023, y afecta tanto a médicos como a enfermeros del sector público y privado.
La consejera portavoz del Gobierno regional, Esther Padilla, ha detallado que, a partir de ahora, el trámite para expresar esta objeción de conciencia se realizará de manera telemática, sustituyendo el método anterior que requería una carta. Esta nueva normativa responde a la situación actual de la región, donde todos los profesionales sanitarios implicados en tales intervenciones han manifestado su objeción.
Padilla ha afirmado que no hay oposición por parte del Gobierno de Castilla-La Mancha a la realización de interrupciones voluntarias en hospitales públicos, siempre que existan profesionales dispuestos a realizar estas prácticas. Ha resaltado que, aunque no se puede obligar a médicos ni a personal de enfermería a participar en ellas, se asegurará que las mujeres que necesiten el servicio tengan acceso a él. La consejera recordó además que existe un acuerdo con clínicas privadas en Madrid, Ciudad Real y Albacete para llevar a cabo estas intervenciones de manera gratuita. Sin embargo, enfatizó que las interrupciones se realizarán en hospitales públicos siempre que haya personal sanitario dispuesto.
La nueva normativa también prevé que las clínicas privadas tengan acceso a la información sobre los profesionales que han declarado objeción de conciencia, información que será comunicada al Ministerio de Sanidad por el Gobierno regional. El registro, que estará administrado por la Dirección General de Planificación, Ordenación e Inspección Sanitaria y Farmacia, permitirá contabilizar el número de profesionales que se oponen y aquellos que puedan cambiar su decisión en el futuro. Padilla aclaró que la declaración de objeción tendrá efectos indefinidos, pero puede ser modificada o revocada en cualquier momento.
Se espera que el nuevo decreto entre en vigor dentro de 20 días tras su publicación en el Diario Oficial de Castilla-La Mancha, prevista para este viernes o el próximo lunes. La gestión del registro se llevará a cabo bajo estricta confidencialidad, asegurando así que los sanitarios dispuestos a realizar estos procedimientos estén totalmente disponibles para cubrir esta necesidad.
