El pasado fin de semana, Toledo se convirtió en el epicentro de formación para los voluntarios de Protección Civil de Castilla-La Mancha. Un total de 44 participantes se reunieron para ser parte de dos cruciales cursos de capacitación, diseñados para proporcionar herramientas en el apoyo psicológico en crisis y la lucha contra la violencia de género.
El primer curso, titulado “Técnicas de apoyo psicológico y social en situaciones de crisis”, se centró en desarrollar habilidades para atender y comunicarse con víctimas que han pasado por situaciones traumáticas. La formación incluyó principios de psicología general aplicables a emergencias sanitarias, habilidades de comunicación y primeros auxilios psicológicos. Se estructuró en dos fases: una telemática y otra presencial, inaugurada por Emilio Puig, director general de Protección Ciudadana. Este curso contó con una asistencia diversa, con voluntarios provenientes de distintas localidades como Albacete, Ciudad Real, Guadalajara y Toledo.
El segundo curso, “Formación en violencia de género”, reunió a 29 voluntarios interesados en adquirir conocimientos teórico-prácticos para atender a víctimas de este tipo de violencia. Los participantes exploraron diferentes formas de violencia de género y la importancia de un trato sensibilizado hacia las mujeres afectadas. También se abordaron nuevas formas de violencia emergentes a través de redes sociales. Este curso contó con la participación de localidades que abarcaban desde Albacete hasta varias áreas de Toledo, fortaleciendo así la red de voluntariado en la región.
Ambas iniciativas no solo buscan mejorar el nivel de preparación de los voluntarios, sino también garantizar una asistencia integral y bien informada a las víctimas. Estos esfuerzos reflejan un compromiso para construir comunidades más seguras y solidarias en Castilla-La Mancha.
