El alcalde de Toledo, Carlos Velázquez, ha manifestado su sorpresa por la ausencia de labores de desamiantado en el cuartel de la Guardia Civil antes de que comenzara su demolición. El edil subrayó que corresponde al Ministerio del Interior llevar a cabo esta tarea. En declaraciones a la prensa, Velázquez destacó que el Ayuntamiento, tras conocer la presencia de amianto en el edificio, solicitó la intervención de la patrulla verde para realizar una inspección inicial y tomar muestras. «En solo tres días teníamos los análisis, que proporcionamos al Ministerio del Interior, ya que ellos son los responsables de llevar a cabo el desamiantado conforme a un protocolo específico», señaló.
El alcalde aseguró que el Ayuntamiento actuó rápidamente en cuanto tuvo conocimiento del problema. «La Secretaría de Estado de Seguridad declaró este asunto como una emergencia, y por lo tanto no se requería un trámite de licencia. Cuando nos informaron del derribo, cumplimos con nuestra parte, sin poder hacer más», explicó.
Velázquez se mostró sorprendido de que el desamiantado no se hubiera considerado previamente, dado que el cuartel, construido en los años 70, es parte de un periodo en el que el amianto era un material habitual. En este sentido, mencionó que su equipo de Gobierno está desarrollando un Mapa del Amianto, destinado a ofrecer información al Ayuntamiento y al público. El objetivo es erradicar este material peligroso de las edificaciones en Toledo, garantizando así la seguridad de los ciudadanos.
En otro orden de cosas, el alcalde realizó un balance positivo del primer fin de semana de las fiestas del Corpus. Destacó la alta asistencia a las actividades programadas en el recinto ferial, donde unas 10.000 personas disfrutaron del concierto de Medina Azahara. Asimismo, unas 2.000 personas participaron en el evento de la Carroza del Teatro Real, considerado un «espectáculo y homenaje para los sentidos», sin que se registraran incidentes graves.
Finalmente, ante las elevadas temperaturas previstas para la semana del Corpus, Velázquez instó a los ciudadanos a tomar precauciones. Anunció la disposición de tres puntos de abastecimiento de agua en el Ayuntamiento, Zocodover y la Plaza de San Vicente, y no descartó habilitar más en caso de ser necesario para asegurar el bienestar de los asistentes a las festividades.