El Gobierno de Castilla-La Mancha ha reafirmado su compromiso con la caza como una actividad esencial en la región, resaltando su impacto social, económico y ambiental. Durante la gala anual de la Fundación Artemisan en Madrid, el viceconsejero de Medio Ambiente, José Almodóvar, destacó que la caza es clave para fijar población y dinamizar las áreas rurales. Acompañado por Susana Jara, directora general de Medio Natural y Biodiversidad, Almodóvar subrayó que Castilla-La Mancha es la comunidad que más cazadores recibe.
Almodóvar enfatizó el compromiso del presidente Emiliano García-Page con el sector cinegético, explicando que se ha implementado la gratuidad de las licencias de caza para los empadronados en la región. Aproximadamente 50,000 de las más de 100,000 licencias han sido sin costo, junto con la recuperación de los cotos sociales, expandiéndose a nueve con un total de 13,000 hectáreas.
Asimismo, el viceconsejero destacó el Pacto por la Caza de Castilla-La Mancha, que incluye la formación de nuevos cazadores y la certificación de la carne de caza. En cuanto a la mejora de hábitats, se han destinado 580,000 euros en subvenciones para especies de caza menor y se han realizado avances para la conservación de la tórtola europea.
La nueva orden de vedas para la temporada 2025-2026 ha sido presentada, manteniendo a Castilla-La Mancha a la vanguardia en gestión cinegética sostenible. Se autoriza la caza de la tórtola europea los días 23 y 24 de agosto, gracias a cambios en su población. Los cazadores deberán registrar las tórtolas cazadas mediante una aplicación móvil, con formación ya en curso para los titulares de los cotos.
Estas acciones reflejan el esfuerzo del gobierno regional por impulsar una actividad cinegética sostenible y accesible, fomentando la preservación del entorno natural y el dinamismo económico rural.
