La vicesecretaria de Organización del Partido Popular, Carmen Fúnez, ha cuestionado la legitimidad del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, tras la polémica sobre un posible amaño en las primarias del Partido Socialista Obrero Español (PSOE). Durante un acto en Ciudad Real, Fúnez subrayó las posibles implicaciones de estos hechos en el acceso al poder en España, e insistió en que el proceso que llevó a Sánchez a la Secretaría General del PSOE podría haber influido en su gestión actual.
Las declaraciones de Fúnez surgen en un contexto de creciente desconfianza, alimentada por las declaraciones de José María Aznar, expresidente del Gobierno, quien insinuó que si hubo manipulación en las elecciones internas del partido, podría haber motivos para sospechar manipulaciones en las elecciones generales. Además, la vicesecretaria mencionó informes de la Unidad Central Operativa que apuntan a irregularidades en las primarias del PSOE.
Dentro de sus críticas, Fúnez recordó la promesa incumplida de Sánchez de no conceder amnistías a los independentistas catalanes, un compromiso que, en su opinión, fue abandonado tras las elecciones. En este sentido, enfatizó que el PP sostiene que Sánchez amañó las primarias y engañó a los ciudadanos para llegar al poder. Según Fúnez, esta cuestión es vital para que los españoles puedan formar un juicio informado.
En cuanto al conflicto en Oriente Medio, la vicesecretaria mostró su respaldo a las posturas de Alberto Núñez Feijóo y Kaja Kallas, apelando a la negociación y la diplomacia como pilares para asegurar la estabilidad regional. Fúnez criticó la conducta de Sánchez, sugiriendo que sus acciones están influenciadas por intereses personales, lo que podría afectar la seguridad internacional de España.
Catalogando la situación como «moralmente inaceptable y políticamente impresentable», Fúnez instó a Sánchez a convocar elecciones anticipadas, considerando este paso como esencial para el bienestar del país. Concluyó que, según su perspectiva, la mayoría de los ciudadanos, incluso algunos aliados del presidente, consideran que el gobierno actual está «finiquitado», y que la debilidad de Sánchez lo convierte en un líder «peligroso».
El alcalde de Ciudad Real se sumó a estas críticas, apoyando la idea de que la dimisión de Sánchez y la convocatoria de nuevas elecciones es la única solución viable para la situación política actual. Según el alcalde, esta es una demanda ampliamente respaldada por los ciudadanos de la región.
