La ciudad de Puertollano se embarca en una ambiciosa transformación urbana con la implementación de su Agenda Urbana 2030, un plan que busca guiar su desarrollo sostenible hasta el año 2030. Este proyecto, elaborado con la colaboración de la ciudadanía, busca mejorar la calidad de vida de sus habitantes y atraer financiamiento europeo y nacional para diversos proyectos.
El alcalde Miguel Ángel Ruiz destacó el compromiso de Puertollano con los objetivos de desarrollo sostenible, tras un meticuloso diagnóstico participativo que ha identificado las necesidades de la ciudad. La expectación ahora se centra en la aspiración de obtener 15 millones de euros de los fondos europeos EDIL, y la proximidad para conseguir dos millones de los fondos de biodiversidad destinados a la adaptación de zonas verdes clave como la Avenida de Ciudad Real, el entorno de los Patos y la Dehesa Boyal.
Ruiz subrayó que algunos proyectos serán financiados por el Ayuntamiento, mientras que otros, dada su magnitud económica, necesitarán del apoyo europeo. «Es un trabajo conjunto para garantizar el futuro de la ciudad», afirmó.
La agenda se ha presentado formalmente en el Museo Cristina García Rodero ante representantes de asociaciones, empresas y ciudadanos. Este documento es fundamental para participar en convocatorias como los Planes de Actuación Integrada y proyectos de renaturalización, promoviendo un desarrollo urbano integrado desde lo medioambiental, económico y social.
El alcalde visualiza un Puertollano sostenible, accesible e inclusivo, donde cada ciudadano tenga su espacio. “Queremos un lugar donde los niños jueguen seguros, los mayores disfruten sin obstáculos y las personas con diversidad funcional se muevan libremente”, señaló Ruiz. La participación ciudadana ha sido crucial con aportaciones de técnicos, asociaciones y vecinos en general, según expresó Pablo Macías, de la consultora Khora Urban Thinkers.
Además, se enfatizó la importancia de recuperar espacios emblemáticos como la Dehesa Boyal y el Museo de la Minería, no solo para el turismo, sino para fomentar el orgullo comunitario y mantener viva la historia.
Con la ciudad enfocada en la accesibilidad y el disfrute de todos sus sectores, Puertollano avanza hacia un modelo más cohesionado y resiliente. El objetivo es mejorar la conexión entre barrios y desarrollar espacios verdes, consolidando un entorno donde la historia y la modernidad se encuentren, ofreciendo oportunidades para el futuro.