El Gobierno de Castilla-La Mancha ha anunciado un ambicioso proyecto de ampliación del sistema de abastecimiento de agua para las áreas de Campo de Calatrava, Daimiel y Ciudad Real. Este desarrollo, en colaboración con el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, contará con un presupuesto de 95 millones de euros y garantizará el suministro de agua potable a aproximadamente 150,000 personas en la provincia de Ciudad Real, facilitando además el crecimiento futuro de la región.
Durante un evento celebrado en el Silo de Almagro, la consejera de Desarrollo Sostenible, Mercedes Gómez, acompañada del presidente regional Emiliano García-Page y otras autoridades, destacó la esencial colaboración entre la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha y el Gobierno central. Gómez enfatizó que esta infraestructura es vital para proporcionar acceso a un recurso tan esencial como el agua.
Este proyecto reafirma el compromiso de adoptar un modelo territorial equilibrado y gestionar el agua de manera sostenible. Gómez subrayó la importancia de asegurar el abastecimiento de agua de calidad para los municipios más necesitados, como los doce que dependen actualmente del Consorcio de la Vega de Jabalón, así como Daimiel, que enfrenta una situación de emergencia al depender de aguas subterráneas.
El sistema también busca brindar un suministro seguro de agua en caso de emergencias a los municipios de la Mancomunidad del Gasset, beneficiando a alrededor de 100,000 habitantes. El convenio contempla la conexión con el sistema de la Llanura Manchega a través de la Estación de Tratamiento de Agua Potable de Ciudad Real.
La consejera informó que la adjudicación de las obras se planifica para octubre, y el inicio de los trabajos está previsto antes de finalizar el año, con una duración estimada de dos años. La entidad Infraestructuras del Agua de Castilla-La Mancha será la encargada de gestionar el sistema una vez finalizado.
Mercedes Gómez destacó la importancia de esta obra dentro del contexto del cambio climático, subrayando la necesidad de desarrollar infraestructuras resilientes. El proyecto contribuirá también a la regeneración ecológica de la Mancha Húmeda y a la recuperación de acuíferos, beneficiando al Parque Nacional de las Tablas de Daimiel.
El vicepresidente segundo del Gobierno, José Manuel Caballero, señaló la inversión en la Tubería de la Llanura Manchega como un ejemplo de la continuidad en la política hidráulica de la región. Caballero insistió en la importancia de gestionar los recursos hídricos para el bienestar regional, despojando estas acciones de tintes partidarios.
Finalmente, reiteró el compromiso de Castilla-La Mancha con una política hídrica que rechaza el trasvase y respeta los caudales ecológicos, postura que ha sido defendida recientemente ante las instituciones europeas.
