Estival Cuenca ha clausurado su 14ª edición con un notable éxito, atrayendo a más de 5.000 asistentes que disfrutaron de una variada programación a lo largo de 14 días, superando obstáculos como contraprogramaciones y el mal tiempo. Cerca de 50 actividades se desplegaron en 10 espacios distintos, reafirmando su relevancia en el panorama cultural.
La edición contó con la colaboración de 23 agrupaciones, solistas y talleristas, destacando que un 87% de ellas estaban lideradas por mujeres o contaban con su participación. El festival apostó por el talento local, con 16 grupos oriundos de la provincia de Cuenca.
A pesar de las inclemencias, que causaron la cancelación de dos conciertos, el evento logró completar una cartelera de 17 conciertos. Actividades como los recitales de Antonio Serrano y Flamenco Messengers, así como el de Ale Acosta y Sambas Colgadas, fueron suspendidas por lluvia.
La programación incluyó también talleres de musicoterapia dirigidos a personas con diversidad funcional y cáncer, junto a actividades para los más jóvenes y un concierto didáctico. En el ámbito educativo, se presentó un libro sobre la enseñanza musical, se proyectó una película y se ofrecieron talleres en bibliotecas, incluyendo uno para familias en espera de un bebé.
Próximamente, del 7 al 9 de noviembre, el evento continuará con el VI Encuentro Internacional de Docentes de Música de Cuenca y las XIV Jornadas de Didáctica de la Música y Musicología en la Facultad de Educación. Durante esta edición, se agotaron localidades en cuatro conciertos estrella, como los de Eduardo Fernández y Blanca Ruiz, y el de Luar Na Lubre con Cuélebre, reafirmando así el impacto y la trascendencia de Estival Cuenca en la escena cultural.