En Toledo, se ha llevado a cabo un significativo curso de reciclaje formativo por parte de la Escuela de Protección Ciudadana de Castilla-La Mancha. Este programa, realizado el 12 de julio de 2025, estuvo dirigido a grupos de emergencia ya instruidos en técnicas de reanimación cardiopulmonar (RCP) y en el manejo del desfibrilador automático (DEA).
Emilio Puig, director general de Protección Ciudadana, inauguró el curso subrayando que el principal propósito es refrescar y practicar las habilidades necesarias para aplicar RCP de manera efectiva durante una emergencia, como un infarto, utilizando el DEA.
Con la participación de 21 personas, la actividad no solo se centró en la identificación de una parada cardiorrespiratoria, sino que también exploró la gestión de la situación con uno o dos intervinientes, estableciendo roles de líder y acompañante. Los participantes recibieron entrenamiento práctico esencial en la evaluación de la vía aérea y el uso de desfibriladores automáticos, herramientas críticas en situaciones de emergencia.
Entre los asistentes, se encontraban miembros de varias agrupaciones de Protección Civil de la provincia de Toledo, provenientes de localidades como Borox, Lillo, Méntrida, Numancia de la Sagra, y Pantoja. Además, participaron voluntarios de agrupaciones de El Casar (Guadalajara) y La Solana (Ciudad Real), así como agentes de la Policía Local de Yeles y personal del Servicio de Atención y Coordinación de Urgencias y Emergencias 1-1-2, quienes aportaron su valiosa experiencia a la formación.
Este curso se replicará en tres ocasiones durante el año, siendo esta la primera edición. El objetivo es permitir que un mayor número de integrantes de los grupos de emergencia estén capacitados para realizar intervenciones sanitarias iniciales relacionadas con la RCP, garantizando una actuación adecuada y segura para los pacientes. La iniciativa refleja un compromiso continuo con la formación y la seguridad comunitaria, asegurando que más personas estén preparadas para enfrentar situaciones críticas.