Esta mañana, los trabajadores de Eserman se congregaron frente a Repsol Química, mostrando su descontento ante el Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) propuesto por la empresa. Esta medida se ha originado tras la cancelación del contrato con Repsol Química el pasado 29 de julio, generando incertidumbre entre los empleados.
Durante varias horas, los trabajadores llevaron a cabo una manifestación pacífica con el objetivo de visibilizar su problemática y exigir soluciones frente a la incierta situación laboral que enfrentan. La cancelación del contrato ha generado inquietud en numerosos empleados que ahora temen por su futuro profesional.
Desde la perspectiva de Eserman, la implementación del ERTE es una medida inevitable dados los recientes eventos. No obstante, los trabajadores piden alternativas que reduzcan el impacto negativo en sus condiciones laborales y aseguren la estabilidad profesional en un contexto económico adverso, donde las opciones de reubicación o nuevos contratos aún no se vislumbran.
La concentración de hoy representa solo el primer paso en una serie de acciones planificadas por los trabajadores, quienes buscan abrir un canal de diálogo con las compañías implicadas. El objetivo es encontrar soluciones viables a corto y mediano plazo. Mientras tanto, el sector sigue de cerca el desarrollo de los acontecimientos, a la espera de comunicaciones por parte de ambas empresas sobre posibles acuerdos que puedan atenuar los efectos adversos del ERTE planteado.