El obispo Abilio Martínez Varea está preparado para asumir su nuevo cargo como obispo de Ciudad Real y prior de las Órdenes Militares en una ceremonia que promete ser un acontecimiento notable para la comunidad religiosa. La celebración tendrá lugar este sábado 27 de octubre a las 11:00 horas en la Catedral de Ciudad Real, y se espera que atraiga a una multitud significativa de eclesiásticos y autoridades.
La misa será presidida por el arzobispo de Toledo, Francisco Cerro, quien estará acompañado por el administrador apostólico de Ciudad Real, Gerardo Melgar, y el propio Martínez Varea. El evento comenzará en la emblemática puerta de los Reyes de la Catedral, donde el presidente del Cabildo, Bernardo Torres, entregará el lignum crucis al nuevo obispo, en un gesto lleno de simbolismo. También se llevará a cabo un rito de aspersión con agua bendita.
Después de este inicio espiritual, la procesión se desplazará por la vía sacra hacia la capilla del Santísimo para un momento de oración. Seguidamente, la comitiva se dirigirá a la sacristía donde el obispo Martínez Varea se revestirá para la eucaristía. En esta solemne procesión participarán obispos, arzobispos y sacerdotes de diferentes regiones de España.
El arzobispo Francisco Cerro dará la bienvenida a los asistentes, seguido de una intervención de Roman Walczak, representante de la Nunciatura Apostólica en España, quien hablará en ausencia del Nuncio apostólico Piero Pioppo, ausente por razones diplomáticas.
El momento culminante llegará cuando Gerardo Melgar presente a Abilio Martínez Varea a la Diócesis, leyendo las letras apostólicas que lo designan oficialmente como nuevo obispo de Ciudad Real y prior de las Órdenes Militares. En esa solemne ocasión, Martínez Varea recibirá el báculo, símbolo de su nuevo ministerio, y tomará posesión de la diócesis asumiendo la cátedra episcopal.
La misa contará con la destacada presencia de 23 obispos, entre ellos un cardenal, y cuatro arzobispos, además de 120 sacerdotes de la Diócesis de Ciudad Real y otros de Osma-Soria y Calahorra y La Calzada-Logroño. Se anticipa también la asistencia de importantes figuras políticas, como el presidente regional Emiliano García-Page y el alcalde de Ciudad Real, Francisco Cañizares.
Esta ceremonia no solo marca un nuevo capítulo para la Diócesis de Ciudad Real, sino que también es un testimonio de la profunda tradición y unidad de la comunidad eclesiástica en España.
