Durante un evento en Murcia, el presidente del Partido Popular de Castilla-La Mancha, Paco Núñez, defendió una postura firme del partido respecto a la inmigración en España. Núñez afirmó que el país debe tener control total sobre sus fronteras y decidir quién puede entrar, abogando por una inmigración «ordenada, legal y culturalmente integradora».
Núñez participó junto a Alberto Núñez Feijóo y otros presidentes autonómicos del Partido Popular en la firma de la Declaración de la Región de Murcia. Este documento busca enmarcar el debate sobre inmigración en un contexto de «sentido común y responsabilidad política». En su intervención, Núñez destacó la importancia de reconocer plenamente los derechos de aquellos inmigrantes que llegan con un contrato laboral y una voluntad genuina de contribuir al desarrollo del país. Subrayó que estas personas deben ser integradas en la sociedad, mientras que aquellos con intenciones delictivas deberían ser expulsados de forma automática.
El presidente del PP de Castilla-La Mancha enfatizó la necesidad de una integración basada en el esfuerzo y el reconocimiento laboral, rechazando la dependencia de subsidios como modo de vida. Núñez declaró que los apoyos sociales deben ser una ayuda temporal que facilite el acceso al mercado laboral.
Con la firma de esta declaración, se reafirmaron los principios del Partido Popular en materia de inmigración: orden, legalidad, integración laboral y una política de «tolerancia cero» ante la delincuencia. Estos lineamientos buscan establecer un marco claro y responsable para abordar la inmigración en España.
