La consejera de Desarrollo Sostenible, Mercedes Gómez, subrayó la importancia crucial de los fondos europeos para el desarrollo sostenible de Castilla-La Mancha. Durante la 55ª Reunión Plenaria de la Red de Autoridades Ambientales en Toledo, Gómez destacó que estos fondos son esenciales para avanzar en áreas clave como la economía circular y la transición energética. La región ya se sitúa como la segunda comunidad de España en generación de energías limpias.
La consejera abogó por la creación de sinergias entre distintas administraciones para lograr un equilibrio entre el desarrollo socioeconómico y la protección del medio ambiente. En su intervención, enfatizó la necesidad de esfuerzos conjuntos para abordar desafíos globales como el cambio climático, que requiere una colaboración más allá de las capacidades individuales de cada comunidad autónoma.
Gómez identificó al transporte como la principal fuente de emisiones de gases de efecto invernadero en la región, debido a la centralidad de Castilla-La Mancha y sus plataformas logísticas. Además, señaló a la agricultura y la ganadería como importantes emisores, subrayando la necesidad de descarbonizar sectores que no pueden hacerlo de manera independiente.
Un punto destacado de su discurso fue el éxito en la conservación del lince ibérico, una especie en peligro de extinción. Gracias a los proyectos LIFE financiados con fondos europeos, la población de linces en la región ha alcanzado los 942 ejemplares, posicionando a Castilla-La Mancha como la líder en España en conservación de esta especie. Este logro no solo protege la biodiversidad, sino que también impulsa el turismo de naturaleza, demostrando cómo los fondos europeos pueden tener un impacto transversal en la economía y el medio ambiente.