En el Congreso de los Diputados, en Madrid, el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, defendió la reforma del Estatuto de Autonomía de su región. García-Page subrayó que este proceso refleja un “consenso amplísimo” tanto social como político, destacando el apoyo unánime de quienes respaldan el Estado constitucional autonómico.
Durante su discurso, el presidente regional enfatizó que el objetivo del estado de las autonomías no es modificar el tamaño de España, sino mejorar su funcionamiento. Afirmó que la reforma contribuirá significativamente a este propósito. Además, destacó que el nuevo Estatuto actuará como un “blindaje” para el estado del bienestar que se ha construido en Castilla-La Mancha a lo largo de las últimas cuatro décadas. Según García-Page, este avance legislativo consolida la comunidad autónoma como una realidad “irreversible” en el sentir de sus ciudadanos.
El presidente también reflexionó sobre la evolución del estado de las autonomías en España, señalando que ha promovido una diversidad valiosa que no solo alimenta el crecimiento económico, sino que también refuerza la igualdad en el acceso a los servicios públicos.
La sesión parlamentaria contó con intervenciones de diputados de diversas formaciones políticas, como Ana Isabel Abengózar del Partido Socialista Obrero Español y Francisco Núñez del Partido Popular. Presenciaron el evento importantes autoridades regionales, incluido el presidente de las Cortes de Castilla-La Mancha y el vicepresidente Primero de la Junta, quienes observaron de cerca las discusiones sobre esta significativa reforma estatutaria.
