Toledo ha dado un nuevo y prometedor paso en la mejora de la movilidad y el apoyo a las víctimas de violencia de género en Castilla-La Mancha. El Gobierno regional ha aprobado un innovador servicio de Transporte Sensible a la Demanda (TSD) destinado a la Serranía Baja de Cuenca. Este proyecto, con una inversión de 6,2 millones de euros para un periodo de cuatro años, responde a las crecientes necesidades de movilidad de los residentes en esta zona rural, según indicó Nacho Hernando, consejero de Fomento.
Este servicio de transporte se enfocará en facilitar el acceso a servicios esenciales como los sociales, educativos, administrativos y comerciales. Con la inclusión de un total de 55 municipios, se espera que alrededor de 10.500 personas se beneficien de esta medida. Esta iniciativa se enmarca dentro del Plan de Recuperación post-Dana, centrado en localidades como Mira, y contará con un contrato de servicio de dos años y nueve meses, con posibles prórrogas de hasta 16 meses adicionales.
El consejero de Fomento subrayó el progreso en el despliegue del TSD en toda la región, logrando ya la cobertura en 167 municipios y 268 núcleos poblacionales. Además, se prevé expandir el servicio a más áreas, incluyendo partes de Albacete y Guadalajara, lo que fortalecerá el acceso al transporte en las zonas más remotas.
Por otro lado, el Gobierno regional renovó su convenio con la Comunidad de Madrid, fomentando la cooperación y permitiendo que unos 35.000 ciudadanos sigan beneficiándose de descuentos en los abonos de transporte regional hasta 2029.
Coincidiendo con la cercanía del 25 de noviembre, Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, el Gobierno ha ratificado su apoyo a las víctimas de violencia de género. Desde hace seis años, se han implementado ayudas al alquiler para garantizar un hogar digno a las afectadas. Este año, están disponibles ayudas por un total de 1.150.000 euros, destinadas a más de 1.260 mujeres y sus hijos.
Hernando enfatizó la necesidad de avanzar con el Pacto de Estado contra la violencia de género, destacando la responsabilidad colectiva de luchar contra esta problemática. Reiteró que el compromiso del Gobierno trasciende una fecha específica, motivando a toda la ciudadanía a involucrarse.
Las políticas impulsadas son un reflejo del compromiso del Gobierno de Castilla-La Mancha por elevar la calidad de vida, especialmente de aquellos que viven en contextos rurales y vulnerables, demostrando una vez más su dedicación a causas sociales y comunitarias de gran trascendencia.
















