Mariana, un pequeño municipio de la Sierra de Cuenca, se convirtió este fin de semana en el epicentro de un importante debate sobre el uso y gestión del agua en la región. La Primera Jornada de Regadío del Alto Júcar, titulada «El agua que riega el futuro», reunió a diversos actores del ámbito agrario y político, subrayando el papel crucial del agua como recurso generador de riqueza.
Gracia Canales, viceconsejera de la Política Agraria Común y Política Agroambiental, fue una de las voces destacadas del evento. En su intervención, Canales enfatizó la importancia de aprovechar al máximo el agua disponible en Castilla-La Mancha, una comunidad que sobresale por sus vastas hectáreas de superficie regable, siendo la segunda en España con casi 585,000 hectáreas.
Durante la jornada, organizada por la Comunidad General de Regantes Alto Júcar y apoyada por la Diputación Provincial de Cuenca y el Gobierno regional, Canales destacó los esfuerzos del Ejecutivo autonómico para modernizar los regadíos a través de inversiones que alcanzan los 46 millones de euros. Estas inversiones se han llevado a cabo con la ayuda de fondos europeos, permitiendo a los agricultores locales beneficiarse de regadíos más eficientes.
La viceconsejera instó a las comunidades de regantes a optimizar estas oportunidades de desarrollo, subrayando que las acciones conjuntas fortalecerán su capacidad para afrontar desafíos futuros. Asimismo, anunció que la Consejería está trabajando en un ambicioso Plan Director de Regadíos, que busca expandir y mejorar la eficiencia de las infraestructuras hídricas en la región.
El evento también puso de relieve las preocupaciones en torno a los posibles impactos de la futura Política Agraria Común (PAC) sobre la financiación de infraestructuras hídricas. Canales reafirmó el compromiso del Gobierno regional para asegurar que no se pierdan fondos esenciales, presentando un documento de trabajo a la Comisión Europea para garantizar la continuidad de estas inversiones.
La jornada contó además con la participación de varias figuras relevantes, incluyendo a la vicepresidenta segunda de la Diputación, Marian Martínez; el presidente de la Comunidad de Regantes Alto Júcar, Francisco Javier Turégano; y otros representantes del ámbito agrícola y político. La reunión concluyó con el compromiso unánime de continuar trabajando juntos para proteger y optimizar el recurso hídrico, clave para el futuro agrícola de Castilla-La Mancha.

















