La región de Castilla-La Mancha ha celebrado con entusiasmo la incorporación del Vino de Pago ‘Finca Río Negro’ a su lista de Denominaciones de Origen Protegidas (DOP) de vino, lo que la convierte en la comunidad autónoma española con el mayor número de DOP vínicas reconocidas por la Unión Europea. Con esta adición, la región cuenta ahora con un total de 24 Denominaciones de Origen, a las que se suma la Indicación Geográfica Protegida (IGP) Vinos de la Tierra de Castilla, alcanzando así 25 figuras de calidad vínica.
Este logro ha sido remarcado durante la visita del presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, y el consejero de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, Julián Martínez Lizán, a la bodega Finca Río Negro. En el evento estuvieron presentes diversas autoridades y representantes del sector vinícola, quienes celebraron el reconocimiento de esta bodega, ubicada en el viñedo más septentrional de la región, que destaca por sus condiciones naturales excepcionales que le permiten producir vinos de características diferenciadas.
El Viñedo Finca Río Negro es conocido por su vino blanco de variedad Gewürztraminer, envejecido en sus propias lías, así como por sus vinos tintos monovarietales y multivarietales elaborados con diversas uvas. Este reconocimiento no solo realza la calidad de los vinos de la provincia, sino que también impulsa su comercialización tanto a nivel nacional como internacional bajo la marca de garantía Campo y Alma.
Sin embargo, el día no estuvo exento de preocupaciones. En el mismo escenario, Martínez Lizán dedicó tiempo a abordar la aparición de la peste porcina africana en jabalíes, una enfermedad que no había sido registrada en territorio español desde 1994. Se mostró tranquilo y prudente al asegurar que las administraciones y los ganaderos están trabajando diligentemente para controlar y erradicar la enfermedad, evitando así su propagación y minimizando su impacto potencial en el sector ganadero regional.
La comunidad de Castilla-La Mancha aplaude la expansión de su patrimonio vinícola y, al mismo tiempo, enfrenta con responsabilidad el desafío que presenta la peste porcina africana, reforzando su compromiso con la producción agroalimentaria de calidad y la salud de su industria ganadera.


















