El Gobierno de Castilla-La Mancha ha reafirmado su compromiso con la especialización de los Cuerpos de Policía Local en la región, una iniciativa que ha cobrado vida a través de la Escuela de Protección Ciudadana. Este esfuerzo, liderado por la Consejería de Hacienda, Administraciones Públicas y Transformación Digital, se enfoca en asegurar que los agentes obtengan la formación teórica y práctica necesaria para mejorar la seguridad y protección de los ciudadanos.
Recientemente, un grupo de 30 policías locales provenientes de diversas localidades de Castilla-La Mancha ha completado un curso de Nivel I con el objetivo de convertirse en especialistas en Policía Judicial. Este curso ha brindado a los participantes una oportunidad invaluable para ahondar en temas esenciales como los fundamentos del derecho, el código penal, tipos penales, derecho procesal penal, así como en la instrumentalización de pruebas y la investigación criminal.
En la ceremonia de clausura, Emilio Puig, director general de Protección Ciudadana, destacó la trascendencia de esta formación, que está diseñada en tres niveles orientados a equipar a los agentes con las competencias necesarias para ejercer eficazmente sus funciones de policía judicial. La formación en el Nivel I abarcó un total de 60 horas de modalidad semipresencial, siendo la semana pasada cuando se llevó a cabo la fase presencial en las instalaciones de la Escuela de Protección Ciudadana.
Durante el curso, los agentes asistieron a cinco jornadas intensivas de teoría, dirigidas por expertos en Derecho y altos mandos tanto de la Guardia Civil como de la Policía Local. La importancia del curso se evidenció con la participación del presidente de la Audiencia Provincial de Toledo, Juan Ramón Brigidano, quien se encargó del temario final.
El contenido del curso de especialista en Policía Judicial abarcó temas pertinentes del marco legal actual, incluyendo un enfoque especial en los delitos más comunes y los emergentes, como los tecnológicos. El objetivo principal de esta formación es la prevención de la delincuencia en las calles de los municipios de la región.
Los agentes participantes provienen de una variedad de localidades en las cinco provincias de Castilla-La Mancha, lo que refleja la amplitud del compromiso del Gobierno regional con la capacitación y especialización de sus cuerpos de seguridad. Entre las localidades representadas se encuentran Albacete, Alcázar de San Juan, Almansa, Tomelloso y Valdepeñas, evidenciando un fuerte interés por extender esta formación a toda la región. Con este tipo de iniciativas, el Gobierno busca no solo fortalecer la seguridad pública, sino también desarrollar un cuerpo policial más capacitado y preparado para enfrentar los desafíos contemporáneos de la delincuencia.
