En un contexto económico desafiante, Castilla-La Mancha se ha consolidado como una de las comunidades autónomas líderes en la reducción de su deuda pública, destacando en el panorama nacional bajo la administración del presidente Emiliano García-Page. Según los últimos datos del Banco de España correspondientes al tercer trimestre de 2025, la región ha logrado disminuir su deuda en relación con su producto interior bruto (PIB) de forma significativa, pasando de 35,4 puntos porcentuales en junio de 2015 a 28,5 puntos en septiembre de 2025.
Este logro representa una reducción total de cerca de siete puntos, superando con creces la media nacional de 3,3 puntos durante el mismo periodo, lo que posiciona a Castilla-La Mancha como la tercera comunidad autónoma con mayor descenso en el peso de la deuda pública. A nivel interanual, la tendencia positiva se mantiene con una disminución de 1,3 puntos porcentuales desde septiembre de 2024, un valor superior al promedio del 0,8 por ciento registrado por el conjunto de las comunidades autónomas.
En el análisis trimestral, de junio a septiembre de 2025, la región ha experimentado una reducción de la deuda del 0,6 por ciento, alineándose con la media nacional. Esta cifra se traduce en un descenso absoluto de 130 millones de euros en el importe total de la deuda, reforzando la capacidad del gobierno regional para llevar a cabo una gestión fiscal efectiva.
El Ejecutivo de Castilla-La Mancha ha logrado equilibrar el mantenimiento de unas finanzas públicas saneadas con la implementación de políticas que priorizan el bienestar de los colectivos más vulnerables y el impulso a la actividad económica. El presidente Emiliano García-Page reafirma así su compromiso de utilizar los recursos públicos para fortalecer la economía regional sin comprometer la estabilidad fiscal, convirtiendo a Castilla-La Mancha en un ejemplo de buena gestión económica a nivel nacional.
