Desde 1974, España convive con dos horarios: el de verano, en el cual nos encontramos actualmente, y el de invierno, al cual accederemos esta noche, de tal forma que en la madrugada del Domingo 29, en contreto a las 03:00 horas, todos los españoles tendremos que retrasar nuestros relojes una hora y poner las manecillas señaladon las 02:00 horas.
El objetivo de estos cambios es el de optimizar lo máximo posible el uso de la luz natural, con el fin de conseguir ahorro de energías. Con este cambio, los herencianos, al igual que el resto de españoles ahorraremos en calefacción puesto que habrá una hora más de sol, lo cual también supondrá una hora más de luz natural para estar en la calle ya que anochecerá más tarde, además las empresas también notarán un ahorro de energía electrica, lo cual todo sumado supone unos ahorros energéticos muy considerables.
Si bien, este cambio que tiene multitud de aspectos beneficiosos, también tiene su aspecto negativo para algunas personas a las cuales les cuesta adaptarse al nuevo horario al verse modificado su ritmo biológico de vigilia-sueño. Aunque en cualquier caso, los expertos están de acuerdo en que el cuerpo humano pronto se habitua al nuevo cambio.
