Antonio Trenado y el alcalde de Herencia, Jesús Fernández, visitaron los movimientos de tierra que ya han empezado en dicho término municipal
as obras de las semivariantes de Herencia y Campo de Criptana acabarán a finales del año que viene, según confirmó el delegado de la Consejería de Ordenación del Territorio y Vivienda en Ciudad Real, Antonio Trenado, durante una reciente visita.
Acompañado por el alcalde de Herencia, Jesús Fernández, Trenado inspeccionó los movimientos de tierra que ya ha iniciado la empresa adjudicataria de este proyecto, que evitará que los vehículos que transiten por la CM-420 tengan que atravesar los cascos urbanos de Herencia, Alcázar de San Juan y de Campo de Criptana.
El Gobierno de Castilla-La Mancha adjudicó la construcción de estas dos semivariantes por nueve millones de euros. Las obras comenzaron el pasado día 10 y, según el delegado, “van francamente bien” y “si todo sigue a este ritmo, estarán acabadas a finales de 2010”, concluyó.
Por su parte, el alcalde de Herencia aseguró que “con esta actuación se hace realidad una reivindicación histórica que mejorará la calidad de vida de los herencianos, ya que desviará una gran parte del tráfico pesado, unos seis mil vehículos diarios”. Además Fernández indicó que “esta obra permitirá intervenir en el casco histórico y construir rotondas en la plaza de la Libertad y en la entrada de Alcázar”.
El tramo de la carretera CM-420 comprendido entre Herencia y Campo de Criptana tiene unos veinticinco kilómetros de longitud, incluidos los de la circunvalación de Alcázar de San Juan, una de las zonas con más afluencia de vehículos pesados, que atraviesan estas poblaciones con las consiguientes molestias para los vecinos y conductores.
Con las dos semivariantes que está construyendo el Gobierno de Castilla-La Mancha los vehículos dispondrán de un trazado alternativo a través de la Autovía de los Viñedos y evitarán tener que cruzar las tres poblaciones citadas.
Vía: Nota de Prensa oficial del ayuntamiento de Herencia
