La fiesta de la Cruz de Mayo tiene sus antecedentes en la celebración precristiana, en la que se conmemoraba la vida y el producto de los campos, por lo que se desarrollaban cultos a la naturaleza. En especial, se festejaba adornando el árbol o el tótem, situado en el centro del pueblo, al que se le ponían adornos o flores, mientras se hacían danzas rituales y se cantaban o hacían recitaciones.
La festividad de La Cruz de Mayo está muy arraigada en la provincia de Ciudad Real, donde existen poblaciones con una enorme tradición como por ejemplo la propia Ciudad Real capital, Piedrabuena o Villarrubia de los Ojos por citar algunas de ellas.
Cruces de mayo en Herencia
En Herencia esta festividad acostumbraba a celebrarse con el montaje de Cruces en ermitas, calles y casas particulares, sin embargo, de un tiempo a esta parte, esta costumbre se fue perdiendo poco a poco, hasta casi llegar a desaparecer. Solo quedaron unos pocos testimonios como el adorno floral que ininterrumpidamente cada 3 de mayo se coloca en la cuz de madera existente en la fachada de la calle Cruces, propiedad de la familia García Sánchez-Aguilera y, que todavía hoy, tras fallecer la propietaria de la misma, siguen adornado las vecinas.