El pasado viernes se puso el punto y seguido al primer mes de la Escuela de Verano de Herencia con una animada fiesta final. Esta primera convocatoria, destinada a niños nacidos entre 2016 y 2019, reunió a alrededor de 100 participantes de diferentes edades.
Durante el mes, los inscritos disfrutaron de una variedad de actividades deportivas, incluyendo deportes colectivos, acuáticos y alternativos, así como juegos populares y adaptados. Además, se organizaron salidas, destacando la visita al Zoo de Lillo, y se realizaron eventos especiales como una jornada conjunta con los familiares y un triatlón.
El ambiente de deporte, convivencia y diversión predominó a lo largo de estas semanas, gracias al esfuerzo y dedicación de los monitores y voluntarios de la actividad. La organización agradeció públicamente el gran trabajo realizado por todo el equipo.
Los organizadores esperan que todos los niños y sus familiares hayan disfrutado de esta experiencia. En unos días, comenzará el turno de los mayores, a quienes desean mucha suerte en esta nueva etapa de la Escuela de Verano.