Calidad del aire en Castilla-La Mancha se deteriora en verano por olas de calor, según la Junta

Calidad del aire en Castilla-La Mancha se deteriora en verano por olas de calor, según la Junta

La calidad del aire en Castilla-La Mancha durante el verano «no ha sido especialmente buena», coincidiendo principalmente con los episodios de ola de calor que provocan índices más altos de partículas materiales de origen sahariano. Así lo ha explicado Tomás Villarrubia, el director general de Calidad Ambiental, en la presentación del Centro de Control de Calidad del Aire de Castilla-La Mancha. Villarrubia aclaró que este lunes la calidad del aire es buena.

«En una época de olas de calor, acompañada de índices de partículas materiales de origen sahariano, hay ciudadanos que tienen afecciones respiratorias que son mucho más sensibles a este tipo de partículas», manifestó Villarrubia. Añadió que debido a estos episodios, a través de Avis@ –Sistema de Avisos al Ciudadano de Castilla-La Mancha– se ha informado a la ciudadanía cuando esos niveles de contaminación superaban los mínimos exigidos, al menos en tres ocasiones durante el periodo estival.

Estas altas temperaturas afectan a todas las zonas de la región por igual, aunque algunas localidades como Puertollano, y otras cercanas a Madrid como Azuqueca de Henares o Guadalajara han notificado una mayor incidencia desfavorable en cuanto a niveles de ozono, especialmente en un contexto de operación salida de vacaciones. «Se trata, en definitiva, de núcleos de población más numerosos, también aquellos que están cerca de vías de comunicación, donde el tráfico es muy intenso y donde es una fuente de contaminantes más importante», especificó Villarrubia.

En el centro de procesamiento de datos de la capital se monitorizan las 24 horas del día los distintos parámetros de contaminación del aire: partículas en suspensión, dióxido de azufre, dióxido de nitrógeno, monóxido de nitrógeno, monóxido de carbono y ozono. El objetivo es determinar en qué niveles se encuentra la contaminación de cada zona y cómo esta afecta a la calidad de vida de la ciudadanía, con especial atención a quienes tienen afecciones respiratorias y son más sensibles a la contaminación.

Una de las localidades donde más se supera uno de los umbrales en partículas en suspensión (PM10) es Puertollano, que cuenta con cuatro estaciones distribuidas en la ciudad. Aquí se hace «un seguimiento muy estrecho de estas mediciones», por lo que el Gobierno regional realiza las recomendaciones pertinentes tanto al sector industrial como a la ciudadanía.

La red regional de monitorización, con sede en Toledo, recoge más de 100.000 datos diariamente de las 13 estaciones repartidas por toda la región, situadas principalmente en las ciudades más importantes o más sensibles a la contaminación del aire. La previsión es ampliar esta red con una estación más, localizada en la localidad ciudadrealeña de Manzanares.

Esta red emite recomendaciones y alertas a los ciudadanos, informándoles sobre los umbrales que superan los límites razonablemente permitidos y proporcionando consejos como evitar ejercicio al aire libre o permanecer en casa hasta que los índices se estabilicen. Los ciudadanos pueden acceder a esta información a través de mensajes de alerta emitidos por la red de control y vigilancia de la calidad del aire, la web del Gobierno regional o la aplicación de teléfono móvil.

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