El Gobierno de Castilla-La Mancha ha activado a las 17.45 horas el Plan Específico ante Riesgos Meteorológicos Adversos (Meteocam) en fase de alerta para la provincia de Guadalajara, debido a la previsión de fuertes lluvias y tormentas. Esta medida responde a un aviso de nivel naranja emitido por la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), que afecta a la comarca de Parameras de Molina. Según el aviso, se esperan precipitaciones de hasta 30 milímetros en una hora, junto con tormentas que pueden ir acompañadas de granizo y rachas de viento muy intensas.
Simultáneamente, se mantienen activos avisos de nivel amarillo en el resto de la provincia de Guadalajara, así como en toda la provincia de Cuenca y en la comarca de La Mancha toledana, donde las previsiones señalan posibles precipitaciones de hasta 15 milímetros en una hora y tormentas. Esta información ha sido difundida por la Junta a través de una nota de prensa.
Con la activación del Meteocam en fase de alerta, el Servicio de Atención y Coordinación de Urgencias y Emergencias 112 ha notificado a los ayuntamientos y grupos de intervención pertinentes para que puedan poner en marcha las medidas de prevención, seguimiento y respuesta necesarias ante estas circunstancias.
La dirección del Meteocam se mantendrá atenta a la evolución de las predicciones de la Aemet y a las incidencias que puedan surgir, con el fin de adaptar el nivel de respuesta en función de la situación. Esta activación forma parte de una acción coordinada del Gobierno regional, que busca ofrecer una respuesta planificada ante posibles emergencias, optimizando los recursos disponibles.
Ante esta situación, se han emitido una serie de recomendaciones a la población. En caso de encontrarse sorprendidos por lluvias intensas mientras conducen, se recomienda reducir la velocidad y evitar los tramos inundados. Si están en el campo, es aconsejable buscar lugares elevados para evitar riesgos de inundaciones. En los hogares, es importante retirar elementos exteriores que puedan ser arrastrados por el agua y, en caso de inundación, abandonar sótanos y plantas bajas, además de desconectar la energía eléctrica.
Durante una tormenta, se debe evitar estacionar el vehículo o cruzar arroyos y cauces. Asimismo, se recomienda alejarse de vaguadas, ríos o torrentes para no ser sorprendidos por crecidas repentinas de agua. Se aconseja limitar los desplazamientos por carretera y, si son necesarios, informarse adecuadamente sobre las condiciones meteorológicas en el destino, prestando especial atención a posibles obstáculos en las vías.
Finalmente, se recuerda a la ciudadanía que en caso de emergencia deben contactar con el teléfono 112 y se insta a un uso racional de este servicio.
