La comunidad de Naharros, en la provincia de Guadalajara, se prepara para rendir homenaje a una figura histórica que ha dejado una marca indeleble en la arqueología española. La biblioteca local adoptará el nombre de Encarnación Cabré, la primera arqueóloga del país, en un evento que busca consolidar su legado en el corazón de la comunidad. Cabré, quien realizó significativos descubrimientos en la Serranía de Guadalajara, se destacó en una disciplina dominada por hombres, dejando un legado que aún resuena en la arqueología nacional.
El homenaje, que se celebrará el sábado 12 de octubre, está organizado por la asociación sociocultural ‘Gerardo Diego’. El evento busca no solo honrar las contribuciones de Cabré al patrimonio arqueológico local, sino también reivindicar su legado en el marco de una lucha más amplia contra los intereses de la empresa Cuminer SA. Esta multinacional ha sido objeto de críticas por su solicitud para abrir una mina a cielo abierto a escasa distancia de las viviendas, una propuesta que los lugareños ven como una amenaza a su comunidad.
Lidia Barrena, portavoz de la asociación, expresó su inquietud sobre las dificultades que enfrenta Naharros para atraer nuevos residentes y mejorar la calidad de vida. Barrena advirtió que la apertura de la mina podría desalentar a posibles nuevos habitantes, afirmando que «la mina está frenando el crecimiento del pueblo. Hay mucha gente que teme reparar o construir sus casas por miedo a la mina».
Los ciudadanos de Naharros han tomado conciencia del valor de su entorno natural, y sus representantes defienden que una economía sostenible sería más beneficiosa para la región en vez de favorecer a una multinacional. Barrena recordó cómo, al redactar alegaciones para evitar la concesión minera, redescubrieron la implicación de Cabré en la excavación de una necrópolis celtíbera en la zona.
Hace aproximadamente un siglo, Encarnación Cabré llegó a Naharros con su padre para llevar a cabo excavaciones asistidas por los vecinos del lugar. Su legado persistirá en la biblioteca que ahora llevará su nombre, con el fin de fortalecer el vínculo entre la comunidad y su historia compartida.
La jornada de homenaje incluirá una exposición fotográfica sobre los trabajos arqueológicos de Cabré y una charla a cargo de Carmen Jiménez, directora del Museo Cerralbo. Jiménez ha resaltado la intensa conexión de Cabré con el arte y la arqueología desde su infancia, influencias determinantes en su carrera.
Más allá del homenaje, Naharros enfrenta un desafío ambiental significativo. La asociación ‘Salvemos Naharros y su Serranía’ ha unido esfuerzos para contrarrestar la nueva mina, argumentando que la actividad extractiva representa riesgos no solo para la salud de los habitantes, sino también para el entorno. Laura Alonso, presidenta de esta asociación, ha expresado preocupación por la silicosis, una enfermedad que ha afectado a varios trabajadores de la mina debido al polvo de sílice liberado durante la extracción. Alonso advirtió sobre las medidas mínimas de seguridad laboral, añadiendo que «hay trabajadores que, aunque estén vivos, sufren las consecuencias de esta enfermedad».
Con todas estas actividades y reivindicaciones, Naharros busca seguir consolidando su identidad y defender su futuro, cimentando el valor de la memoria y el patrimonio en su lucha por un desarrollo sostenible.