En un reciente encuentro, representantes de varios colectivos toledanos se reunieron para expresar su preocupación por el futuro de la estación de tren de Santa Bárbara y la propuesta de construir una nueva terminal en el Polígono Industrial de Toledo. Las asociaciones, que incluyen a la Asociación de Comerciantes y Empresarios de Santa Bárbara, la Asociación Vecinal Alcántara, la Plataforma en Defensa de la Estación de Toledo y la Asociación de Usuarios Tren Toledo, manifestaron su rechazo a la posible nueva infraestructura, subrayando la importancia de preservar la estación actual.
Los participantes coincidieron en que la estación de Santa Bárbara debería seguir siendo la única estación de tren de la ciudad, dado su papel esencial en el impulso del comercio y la vida comunitaria del barrio. El argumento central es que la apertura de una segunda estación podría amenazar el funcionamiento de la existente, algo que consideran respaldado por un estudio informativo que indican comprometería la estabilidad de la estación y, por consiguiente, del barrio.
«La estación de Santa Bárbara es el motor del barrio», declararon, en un claro llamamiento a mantener Toledo Central y oponerse a la idea de Toledo Exterior. Durante la reunión, también se destacaron los errores cometidos en otras ciudades, citando el caso de Cuenca, donde decisiones similares habían llevado al cierre de estaciones.
La Asociación de Usuarios Tren Toledo dio a conocer los planos del estudio informativo facilitado por el Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible. Los presentes se mostraron sorprendidos al notar que la nueva estación propuesta estaría situada en una zona poco accesible del polígono industrial, implicando además la construcción de un viaducto de 2,3 kilómetros sobre el río, lo que suscita preocupaciones adicionales sobre su viabilidad y utilidad.
Además, surgieron inquietudes sobre la fragmentación del tráfico ferroviario entre dos estaciones, lo que afectaría negativamente a los trabajadores que viajan diariamente a Madrid. La perspectiva de tener que trasladarse entre estaciones se perfila como una molestia potencialmente agravada por la posible reducción de servicios.
Los representantes expresaron la necesidad de aclarar las implicaciones de establecer dos estaciones, alertando del posible «caos ferroviario y deterioro del servicio». Según comentaron, muchos de los defensores de la nueva estación lo hacen desde un «absoluto desconocimiento» del sector ferroviario y de las verdaderas necesidades de los usuarios habituales.
En un acto de movilización, las asociaciones comenzarán a recolectar firmas en negocios del barrio y en el local social de la Asociación Vecinal Alcántara. Estas firmas se presentarán como parte de las alegaciones al estudio informativo. «El barrio se levanta para defender a su estación y decir no a Toledo Exterior. Animamos a todos los interesados a participar y movilizarse en defensa de la estación, nuestra estación, de Santa Bárbara», concluyeron los representantes, convocando a la comunidad a unirse a la causa.