El Grupo Municipal de Izquierda Unida en el Ayuntamiento de Puertollano ha manifestado su firme oposición al nuevo canon medioambiental del agua, impuesto que se encuentra vigente desde el 1 de enero de este año. Este canon, aplicado por la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, se ha convertido en un nuevo incremento en las tarifas del agua para los habitantes de la ciudad, que ya se enfrentaron a aumentos previos autorizados por el equipo de Gobierno del Partido Popular.
Jesús Manchón Sierra, portavoz del Grupo Municipal de IU, criticó duramente esta medida del Ejecutivo autonómico, tildándola de impuesto extrajudicial. Según Manchón, los ingresos generados por este canon deberían destinarse a nuevas instalaciones y su mantenimiento, asegurando un ciclo de agua óptimo para los municipios. Sin embargo, desde Izquierda Unida se teme que esta recaudación perjudique a las familias más vulnerables, además de fomentar un cambio insostenible del modelo agrario de secano a regadío en una región donde el agua escasea.
A pesar de coincidir con el Partido Popular en su crítica al canon medioambiental, Izquierda Unida no apoyó la moción presentanda por los populares en el Pleno de enero. Manchón argumentó que el modelo de gestión del Partido Popular, que considera al agua como un bien mercantil y no como un derecho humano esencial, tal como lo reconoce la ONU, es inaceptable.
El canon medioambiental, según lo establecido, impone un gravamen de 2 euros lineales sobre el consumo de agua, abarcando tanto el uso doméstico como otros sectores como el agrícola y ganadero. A esto se añade un canon variable que puede llegar a 0,60 euros por metro cúbico, dependiendo del consumo. Aunque existen ciertas bonificaciones, no se contemplan para familias monoparentales.
Además, se prevé un cobro adicional por canon de aducción, calculado en 0,39 euros por metro cúbico, y un canon de depuración de 0,55 euros por metro cúbico. Estos cargos serán recaudados por los ayuntamientos si gestionan el agua directamente o por empresas concesionarias si la administración del recurso está privatizada, como es el caso de Puertollano, donde la gestión corre a cargo de la empresa mixta Aguas de Puertollano.
Izquierda Unida advierte que estos nuevos impuestos provocarán dificultades de pago para muchas familias, al sumar los ya existentes a los costos variables y los cánones de aducción y depuración. La formación política alerta de que el objetivo final de esta recaudación es financiar un cambio erróneo en el modelo agrícola de Castilla-La Mancha.