La reciente actualización de la Confederación Hidrográfica del Tajo (CHT), organismo dependiente del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITECO), ha generado preocupación en varias regiones de España. Según la información publicada, un conjunto de estaciones de aforo ha superado el umbral de aviso rojo, alertando a las autoridades y a la población local.
En Castilla-La Mancha, la provincia de Guadalajara enfrenta una situación crítica con varios ríos bajo aviso rojo. En particular, se encuentran en situación de riesgo el río Henares, tanto en el azud de Humanes como en Guadalajara; el río Tajuña en Armuña; y los ríos REOE Loranca y Jara en Valdepeñas. En la provincia de Toledo, el río Guadarrama en Barruelos-Bargas también ha sido identificado con este nivel de alerta.
El aviso de nivel rojo señala situaciones hidrológicas extremadamente peligrosas, con una alta probabilidad de inundaciones afectando áreas habitadas y provocando cortes en vías de comunicación clave. Ante esta amenaza, las autoridades recomiendan tomar medidas de precaución adicionales para proteger los bienes y garantizar la seguridad de la población.
La alerta también se extiende a la Comunidad de Madrid, donde varias localidades están en riesgo. En esta comunidad, el Henares en Espinillos, el Jarama en Mejorada-San Fernando y en San Fernando, junto a varios puntos de aforo como Algete, Puente Titulcia, Puente Algodor y Aldea del Fresno, se encuentran bajo el aviso rojo. La provincia de Cáceres, a su vez, está afectada con el río Alagón en Coria en igual condición de peligro.
La CHT ha instado a la población y a las autoridades locales a mantenerse informados sobre las condiciones hidrológicas a través de su página web. Este recurso proporciona información en tiempo real sobre los caudales y ofrece avisos pertinentes para facilitar una mejor preparación ante cualquier eventualidad.
En situaciones de desembalses significativos, se subraya la importancia de notificar de inmediato a las autoridades competentes en protección civil. Estas entidades son las responsables de evaluar la situación y coordinar las acciones necesarias para garantizar la seguridad de los ciudadanos. Cada comunidad autónoma afectada dispone de su propio servicio de Protección Civil, encargado de gestionar las emergencias que puedan surgir.
La situación demanda un monitoreo constante y colaboración entre las autoridades y la ciudadanía para mitigar el impacto de las posibles inundaciones y preservar la seguridad local.
