En un esfuerzo por mejorar el acceso a servicios esenciales en áreas despobladas, el Gobierno de Castilla-La Mancha ha destacado el éxito del modelo de transporte sensible a la demanda en varias comarcas de la región. Este innovador sistema de transporte, que carece de horarios e itinerarios fijos, ha sido fundamental para conectar a los ciudadanos con servicios públicos y privados ubicados en las cabeceras de comarca.
El comisionado del Reto Demográfico, Jesús Alique, participó en un encuentro organizado por la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) en conmemoración de su 50 aniversario, donde resaltó la importancia de este modelo como herramienta de cohesión social y vertebración territorial. Según Alique, el transporte sensible a la demanda está diseñado para facilitar el acceso a servicios y actividades no disponibles en los municipios rurales, mejorando así la calidad de vida de sus habitantes.
Además del transporte, Castilla-La Mancha ha dado pasos significativos en el ámbito digital, destacando que 885 localidades despobladas ya cuentan con acceso a fibra óptica, lo que representa el 64 por ciento del total, mientras que 599 municipios disfrutan de acceso a la tecnología 5G. Estas infraestructuras digitales han permitido mejorar la prestación de servicios públicos como la telemedicina y la teleformación, así como facilitar el comercio y el ocio electrónico.
Durante el evento, Alique también anunció la creación de puntos de atención telepresencial para consumidores en áreas rurales donde no hay Oficinas Municipales de Información al Consumidor (OMIC). Estos puntos servirán para impartir formación y promover el consumo de productos locales y de calidad.
La lucha contra la desigualdad ha sido una prioridad para el Gobierno regional, como lo demuestra la implementación de la Ley de medidas contra la Despoblación y su Estrategia asociada. Estas iniciativas garantizan el acceso a servicios esenciales como la educación, a través de la apertura de escuelas y comedores escolares, y la sanidad, asegurando servicios de urgencias y emergencias sanitarias a menos de 30 minutos.
El encuentro contó con la presencia de destacados representantes, entre ellos, Enrique García, responsable de Relaciones Institucionales de la OCU, Itziar Fernández de la Cruz, delegada de la OCU en Castilla-La Mancha, José Antonio Romero, gerente del CERMI en la región, y Alejandro Salcedo, coordinador del área de Consumo del Gobierno autonómico.