Castilla-La Mancha ha experimentado una significativa reducción en las cifras de desempleo al cierre del tercer trimestre de 2025. Los datos más recientes indican que 5.400 personas han abandonado las listas de paro, lo que sitúa el número total de desempleados en 134.900. Este descenso es visto como un resultado positivo de las políticas de empleo implementadas en la región, marcando un hito en los niveles de ocupación.
A pesar de estos avances, la situación laboral sigue enfrentando desafíos importantes. La Unión General de Trabajadores (UGT) ha enfatizado la necesidad urgente de medidas específicas para abordar el desempleo femenino y de larga duración. Estos grupos continúan enfrentando una mayor vulnerabilidad en el mercado laboral, lo que resalta la importancia de una recuperación que sea inclusiva y sostenible.
El sindicato ha hecho un llamamiento para implementar acciones concretas que mejoren la formación y la integración de estos colectivos en el ámbito laboral, asegurando una real igualdad de oportunidades. Si bien la reducción del paro es un indicador alentador, la verdadera meta es lograr un empleo que sea de calidad y accesible para toda la población. La búsqueda de un mercado laboral equitativo y estable sigue siendo una prioridad en la agenda regional.



