En el corazón de Sevilla, el Espacio Exploraterra–Centro Nao Victoria fue el epicentro de “Sabor Quijote”, un evento que ha reforzado su posición como un vibrante escaparate de la riqueza turística y gastronómica de la provincia de Ciudad Real. Presidido por Miguel Ángel Valverde Menchero, presidente de la Diputación de Ciudad Real, el encuentro marcó el cierre de una edición histórica que ha elevado los sabores e historias de Ciudad Real a un nivel superior.
El evento congregó a una variedad de figuras, desde cocineros con estrellas Michelin hasta empresarios y periodistas. Todos se reunieron para celebrar a una provincia que ha logrado combinar tradición y modernidad en su rica propuesta gastronómica. Valverde expresó su emoción al destacar su conexión personal con Sevilla, una ciudad que aprecia por su belleza y universalidad. Además, subrayó la importancia de la marca del Quijote como un símbolo poderoso de una región rebosante de cultura, tradiciones culinarias y productos exclusivos.
La cita fue protagonizada por tres chefs distinguidos con estrellas Michelin: Rubén Sánchez Camacho, Miguel Ángel Expósito y José Antonio Medina. Ellos llevaron a cabo demostraciones que fusionaron de manera ingeniosa lo tradicional con lo moderno, haciendo uso creativo y atractivo de productos típicos manchegos.
Sin embargo, más allá del espectáculo culinario, Valverde enfatizó el rol del evento como un motor de desarrollo turístico y económico. Afirmó que Ciudad Real se ha convertido en un destino en sí mismo, prometiendo una experiencia integral a cada visitante.
María Jesús Pelayo, vicepresidenta primera, destacó el impacto del proyecto “Sabor Quijote”, que ha conseguido 8 millones de visualizaciones y refleja la creciente curiosidad que la cultura y gastronomía de la provincia despiertan a nivel nacional. La colaboración con creadores de contenido ha sido crucial en esta expansión, fortaleciendo la visibilidad de Ciudad Real como una tierra de oportunidades.
La jornada también fue un espacio para sinergias y colaboraciones. La presencia de figuras clave del comercio y la hostelería, además de las denominaciones de origen de la provincia, refuerza el compromiso colectivo de continuar proyectando lo mejor de Ciudad Real.
El evento concluyó con un mensaje claro: Ciudad Real no es simplemente una parada en el camino, sino un destino digno de ser explorado a fondo. Con propuestas culinarias que deleitan los sentidos y una oferta cultural e histórica robusta, la provincia se posiciona como un polo de atracción en el mapa turístico de España.
Conforme “Sabor Quijote” continúa su recorrido por diferentes comunidades autónomas, queda demostrado que el legado de Don Quijote sigue vivo, construyendo puentes entre pasado y futuro, entre tradiciones y modernidad, y entre pueblos y ciudades que esperan descubrir la esencia de Ciudad Real.
