Hace unas semanas fue presentada, oficialmente, la iniciativa Escuela de Ciudadanos, la primera actividad que se planteó abierta al público, fue un encuentro dirigido a conocer la realidad de pueblo saharaui. Con esta escusa un grupo aproximado de veintes personas, mayoritariamente de Herencia, pero también de otras localidades vecinas, tuvo la oportunidad de intercambiar ideas, inquietudes, y dudas sobre esta temática que nos es tan cercana.
Tras esta primera experiencia, muchas han sido las charlas y las vueltas dadas pensando en como enfocar una nueva actividad o propuesta, que con el mismo formato, distendido y abierto a todo el publico pudiera ser de interés, a la vez que tratara alguna temática de actualidad.
Así en esta ocasión desde Escuela de Ciudadanos nos gustaría «Invitaros a creer» un acercamiento, un intercambio de ideas, opiniones. Una invitación a crecer, buscando ser un nexo entre quienes necesitan ayuda y quienes puedan darla, al mismo tiempo que nos llaman la atención sobre esa economía del bien común, que no es otra que la cultura de la solidaridad en nuestra sociedad.
Sin duda, todos, quien más y quien menos, de una u otra forma, hemos pensado que otra realidad es posible. Sin duda, todos, quien más y quien menos, de una u otra forma, hemos cambiado nuestra realidad. Con un carácter más global o local, con un impacto más general o específico, de una forma más constante en el tiempo o esporádica, con voluntad de hacerlo o simplemente por casualidad.
Es por esto que desde el colectivo Escuela de Ciudadanos de Herencia os invitamos a compartir cientos de razones que nos ayudarán a crecer, a creer y a crear. Os invitamos a compartir relatos sobre SOLIDARIDAD y de cómo se puede cambiar el mundo empezando localmente, de como muchas pequeñas partes pueden lograr grandes transformaciones. Veremos el relato de Manuel Lozano y esperamos poder contar con el vuestro.
- Sobre Manuel Lozano
Manuel Lozano tiene 27 años. Se recibió de abogado en la Universidad Católica de Salta (Argentina) con el mejor promedio de su promoción y luego realizó estudios de posgrado con especialización en gestión de las organizaciones sin fines de lucro en la Universidad de San Andrés. Nació en Chascomús, provincia de Buenos Aires, donde a los 13 años comenzó a ayudar como voluntario en un hogar de niños, y allí se gestó el camino que elegiría para el resto de su vida. A los 18 años ingresó a la Red Solidaria, una organización compuesta por más de dos mil voluntarios, que no tiene personería jurídica ni sede, que no maneja dinero y que es, en Argentina, un nexo entre quienes necesitan ayuda y quienes pueden darla, al mismo tiempo que busca consolidar la cultura de la solidaridad. Manuel ha sido director de la Red Solidaria, recorre su país semana tras semana comprometiéndose con escuelas rurales, comedores, familiar y diversas organizaciones. Procura no sólo asistir en el terreno de las necesidades básicas sino generar proyectos de desarrollo comunitario a largo plazo y, al día de hoy, ha impulsado la creación de setenta redes solidarias en el país. La Red Solidaria fue postulada en cuatro oportunidades al Premio Nobel de la Paz.
