Los niños y niñas que participan este año en el programa «Vacaciones en paz», impulsado por la Federación de Asociaciones de Amigos del Pueblo Saharaui, tendrán la oportunidad de pasar el verano en la provincia de Ciudad Real lejos de los 50 grados que registran estos meses en los campamentos de refugiados saharauis, en Tindouf, en el desierto de Argelia, gracias a la Diputación de Ciudad Real.
Un año más, la institución provincial, presidida por José Manuel Caballero, corre con los gastos del traslado de los escolares desde los campamentos a España. En concreto, abonará los pasajes de avión por un importe de 114.700 euros.
La Diputación brinda así a los menores saharauis la oportunidad de salir de su entorno habitual, marcado por la escasez de alimentos y por la necesidad, que se traduce en la falta de servicios básicos y de medicinas, y en la ausencia total de comodidades. Los pequeños disfrutan en la provincia de Ciudad Real de un verano que les sirve para recuperarse, para recibir asistencia médica y para convivir con familias de acogida que les muestran su solidaridad con cariño y cuidados, como si fueran sus hijos biológicos.
Como todos los años Herencia será un punto de referencia para que estos niños y niñas saharauis disfruten de un verano diferente y en paz.